Aquí no tenemos ninguna estructura, no existe tejido empresarial. Y encima nos dan largas con la mina de Monesterio, que seguimos esperando la DIA (Declaración de Impacto Ambiental) para que se pueda volver a poner en marcha. Aunque la construcción vive algún repunte (donde los sueldos suelen ser más altos), lo único que realmente nos queda son los servicios, un sector que crea empleo pero muy precario: contratos por días o semanas, y sólo de algunas horas, aunque después se trabaje más tiempo. De esta manera, los sueldos cada vez más bajos», expresa Patrocinio Sánchez, secretaria general de UGT Extremadura. La portavoz sindical hace este resumen de la situación regional tras hacerse públicos los últimos datos del INE sobre la evolución del coste salarial (un concepto que incluye el sueldo base más los complementos, horas extraordinarias o pagos atrasados) en el último año. Si a nivel nacional este parámetro se ha resentido, en nuestra comunidad la caída ha sido el triple.

Las cifras oficiales dicen que el descenso en 2016 del coste salarial fue del 0,7% en el país y del 2,3% en nuestra comunidad. «Está directamente relacionado con la bajada de los sueldos, motivada precisamente por la precariedad, porque los empleos son cada vez más reducidos (el 88% de los contratos son de menos de 30 días o por servicio). Ahora para cubrir un puesto se hacen cuatro contratos ya. Parece que quitas a cuatro personas de la lista del paro, pero la realidad es que las condiciones son inaceptables», manifiesta Sánchez.

Y añade que en Extremadura las nuevas afiliaciones a la Seguridad Social en 2016 correspondieron principalmente al sector servicios. «Sobre todo a trabajos relacionados con el comercio y la hostelería, que es donde el empleo precario predomina».

EN MANOS DE MUJER / Habría que recordar que el 70% de los contratos temporales o parciales que se firman en la comunidad autónoma están en manos de mujeres.

Los números del INE reflejan que los costes laborales han experimentado igualmente una caída (0,8% a nivel nacional y 2,2% a nivel regional). En este concepto se incluye, además del coste salarial, otros como las cotizaciones a la Seguridad Social, indemnizaciones por despido, adquisición de prendas de trabajo, gastos de locomoción y dietas de viaje. Y esas aportaciones a la Seguridad Social también han bajado. «Si se cobra menos, pues se cotiza menos, es lógico. Esto afecta, sin duda, a la estabilidad del mercado laboral», subraya Sánchez.

Con todos los datos sobre la mesa, el secretario general de CCOO Extremadura, Julián Carretero, tiene claro que vivimos en un país que funciona «a dos velocidades». En cuanto a las condiciones precarias, asegura que «es un engaño» asegurar que la subida salarial impide la generación de empleo, ya que Extremadura tiene el coste salarial más bajo de España y el paro más alto, «justo lo contrario de lo que ocurre en el País Vasco». El desempleo regional se sitúa actualmente en el 28% (más de 122.800 personas).

Según los datos del INE, el sueldo medio de un trabajador extremeño es de 1.549 euros brutos, lo que supone un descenso del 2,4% con respecto al pasado año. Si se compara con el cómputo nacional, los extremeños cobran 344 euros menos cada mes que la media del resto del país (lo que implica un 19%).

«Tenemos que seguir reivindicando para que el mercado laboral no caiga de lleno en unas condiciones hostiles difíciles de superar», apostilla la portavoz de UGT.