En Extremadura se han registrado 14 casos de personas afectadas por calzados contaminados con la sustancia tóxica dimetilfumarato, en su mayoría botas, y se han inmovilizado aproximadamente 4.200 pares a la espera de que un informe señale si están libres de la sustancia nociva y por lo tanto no constituyen un peligro para la salud o deben ser destruidos.

Así lo indicó el director del Instituto de Consumo de Extremadura, Pedro García Ramos, quien explicó que hasta el momento y desde que apareció el primer caso en la región el 29 de diciembre pasado se han detectado 14 casos de diversas marcas que contenían este producto. En concreto, los casos han aparecido en Hornachos, Mérida, San Vicente de Alcántara, Herrera del Duque, Arroyo de San Serván, Navalmoral de la Mata, Cáceres y Badajoz.

En cuanto a las marcas de calzados contaminados, García Ramos explicó que proceden generalmente de China pero también de países asiáticos. Estos productos habían sido expuestos al dimetilfumarato contenido en pequeñas bolsas en el calzado o bien por el contacto con estas bolsas en un gran contenedor.

En su comparecencia en la Comisión de Consumo de la Asamblea, informó de que a partir de la alerta emitida por el Instituto Nacional de Consumo, la Junta comenzó a realizar inspecciones en establecimientos de la región para localizar los productos que pudieran estar contaminados e inmovilizarlos de forma cautelar.

Además, el Instituto de Consumo ha establecido un contacto "permanente y diario" con los mayoristas y minoristas de la venta del calzado a quienes ha hecho llegar una carta personalizada informando del problema, informa Europa Press.

La diputada del PP Felisa Cepeda señaló que "la realidad es que el sistema ha fallado" y productos que contenían esta sustancia nociva han llegado al consumidor. Indicó que una de las responsabilidades de las administraciones en materia de consumo es "prevenir" y "sobre todo informar y proteger" a los consumidores.

El diputado del PSOE Francisco Macías señaló que es "evidente" que el sistema ha fallado pero apuntó que fenómenos como este se suceden en "un mundo globalizado" como el actual porque la permeabilidad y la libertad de entrada de productos a la Unión Europea es "grande".