La Consejería de Sanidad puso en funcionamiento el año pasado el Plan Integral sobre Enfermedades Cardiovasculares de Extremadura 2007-2011, con el que pretende frenar la incidencia de este tipo de patologías, que cada año causan la muerte a 3.500 personas en la región.

El objetivo fundamental es fomentar el conocimiento y la cultura de la prevención de enfermedades como el infarto de miocardio, la insuficiencia cardiaca o el ictus.