Las obras de construcción de los hospitales de Tierra de Barros, en Almendralejo, y La Siberia, en Talarrubias, comenzarán en un plazo de "dos o tres meses" y estarán concluidas "en dos años", según aseguró ayer el consejero de Sanidad y Consumo, Guillermo Fernández Vara, tras anunciar que el Consejo de Gobierno de la Junta ha dado luz verde a la contratación de las obras, así como a la ampliación y reforma de los complejos hospitalarios de Coria y Navalmoral de la Mata, con el fin de dotarlos de habitaciones individuales y adaptar la cartera de servicios, y la edificación de un nuevo centro de salud en Montijo. Para todos estos proyectos, el Ejecutivo invertirá 43,2 millones de euros (7.187 millones de pesetas).

La construcción del hospital de alta resolución de Tierra de Barros contará con un presupuesto de 14,4 millones de euros (casi 2.400 millones de pesetas), mientras que el de la Siberia será de 12,2 millones de euros (2.030 millones de pesetas). El titular de Sanidad cree "un plazo razonable para obras de más de diez mil metros cuadrados" los dos años de ejecución de las mismas, lo que supone que acabarán a mediados del 2005.

DEFENSA DE LA SANIDAD PUBLICA

Estos dos centros hospitalarios, más el resto de las obras que se van a realizar demuestra, reiteró, que la Junta apuesta por la sanidad pública. Como ejemplo recordó que "antes había epidural en un sólo hospital y ahora en siete", o que "el 23 por ciento de las prótesis en el sector privado ha habido que reintervenirlas, porque el traumatólogo venía de Madrid, operaba, se iba y nada más se supo". Además, mostró su "gratísima satisfacción" por el hecho de que se hayan ofertado en Plasencia 120 prótesis para operarlas en clínicas privadas de Cáceres "y 93 personas han dicho que no, algo que indica que prefieren el sistema público".

Según Fernández Vara, en la sanidad privada "hay mucho mercado", aunque reconoció algunos defectos de la sanidad pública, como "las excesivas cesáreas que se practican".

Por otro lado, calificó como "un disparate" que haya hospitales que excluyan a homosexuales de la donación de sangre "porque el peligro está en la práctica de riesgo".