Un total de 60 extremeños han establecido, en algo más de año y medio, su testamento vital. Hace exactamente 20 meses que la Junta de Extremadura reguló el derecho reconocido por ley de que los ciudadanos puedan expresar de forma anticipada sus últimas voluntades, ante una situación de terminalidad sobrevenida por la evolución de una enfermedad o por cualquier otro problema que comprometa la vida, "y el ejercicio de este derecho en Extremadura se va consolidando entre nuestros ciudadanos y son cada vez más los que lo ejercen", señala José María Vergeles, director general de Gestión del Conocimiento de la Consejería de Sanidad y Dependencia.

El Diario Oficial de Extremadura (DOE) publicaba en octubre del 2007 el Decreto 311/2007, de 15 de octubre, a través del cual la Junta regulaba el contenido, organización y funcionamiento del Registro de Expresión Anticipada de Voluntades, y se creaba el fichero automatizado de datos de carácter personal del citado registro. Con ello, la Administración regional comenzaba a regular el derecho reconocido a los ciudadanos por ley y lo adaptaba a la legislación nacional sobre esta misma materia.

Con su inclusión, además, en un registro nacional del Ministerio de Sanidad y Consumo, quedaba garantizado que cualquier documento de expresión anticipada de voluntades que se registrara en Extremadura quedaría registrado de forma automática en el Registro Nacional. Con ello, "el derecho se asegura en todo el territorio nacional, independientemente de dónde o en qué centro sanitario se produzca la eventualidad que lleve al uso del documento que se ha registrado por parte de los médicos que atiendan al paciente", matiza José María Vergeles.

De su resultado en Extremadura, tras sus ya casi dos años de funcionamiento, hace ahora balance el director de Gestión del Conocimiento, destacando su consolidación y el hecho de que, como se ha indicado, hasta 60 personas han hecho ya uso en la comunidad de este derecho expresando su testamento vital.

UN DERECHO ASEGURADO La idea de la Junta, señala Vergeles, ha sido "trabajar siempre para que el derecho que conlleva el expresar de forma anticipada las voluntades estuviese asegurado en todo el territorio nacional" y, además, que cualquier ciudadano "tuviera el registro abierto 24 horas al día los 365 días al año, con el fin de que la utilización del documento por el personal facultativo y por el ciudadano para poder expresar su voluntad, cancelar la expresión anterior o modificarla en cualquier momento estuviera garantizada".

Este trabajo, añade el director general, ha conllevado la coordinación de varios departamentos de la Junta, la utilización del teléfono y el sistema de emergencias 112 y su conexión con el registro que se creó en la Consejería de Sanidad y Dependencia, "dos hechos fundamentales para lo que es el asegurar el pleno derecho en el sentido expresado".

De esta forma, concluye Vergeles, ante una situación de terminalidad del paciente, su documento de expresión anticipada de voluntades "puede ser adecuadamente usado en cualquier parte del Sistema Nacional de Salud, pues el Centro de Urgencias y Emergencias 112 está conectado de forma segura al registro y puede utilizar el documento del ciudadano en cualquier situación, incluidas las emergencias médicas y la atención fuera de cualquiera de los centros sanitarios existentes en la Comunidad Autónoma". Y de la misma forma, "el ciudadano que ya haya expresado su voluntad a través de un documento y quiera revocarla o modificarla lo puede hacer, con este procedimiento, a cualquier hora del día y de la noche".