El líder del PP, José Antonio Monago, justificó el apoyo de su grupo a la enmienda a la totalidad de Podemos alegando que ambos "coincidían en lo esencial: la devolución de unos presupuestos que no son buenos para la región". Para Monago, estas cuentas "infumables" y carentes de diálogo suponían la vuelta "a la vieja política y un pasado de recesión con un afán tóxico por desmontar todo lo impulsado en la legislatura anterior". El popular criticó el recorte de 251 millones y tras denunciar la bajada de las partidas destinadas a las infraestructuras --"ni en los años más duros de la crisis se habían destinado cifras tan bajas", dijo--, o el campo extremeño, aseguró que de haber seguido adelante se hubieran generado 22.000 parados más: 18.000 por el recorte en las inversiones y 4.000 por el "hachazo" a las políticas activas de empleo. "Se han olvidado de las palancas de desarrollo" dijo Monago, que criticó que se incluyeran 34 millones para renta básica cuando se prometieron 80. Del incremento de la sanidad, afirmó que la mayoría se va a las farmacias y al personal, pues "se gastarán cuatro veces más en directivos que en el hospital de Don Benito-Villanueva". Por último, el popular volvió a posicionarse en contra de una subida de impuestos "generalizada" a pesar de la mejora económica y criticó que se deje "para después de las elecciones".