Un año más, el sector de la vivienda fue el que provocó un mayor número de reclamaciones de los ciudadanos extremeños ante la Unión de Consumidores, una asociación que tramitó más de 9.000 quejas y denuncias de los usuarios de la comunidad.

Además de en la enseñanza --un dato inflado por los casos de las academias de idiomas Opening y Wall Street-- también hubo muchas denuncias contra las eléctricas, puesto que aún hay determinadas zonas con un servicio muy deficiente, como la Siberia extremeña o la Campiña Sur, según explicó Javier Rubio.

La banca, las reparaciones, el comercio, los seguros y el turismo fueron otros de los sectores en los que se presentaron más quejas, según el balance anual presentado ayer por la UCE.