Seis de cada diez comunidades de Extremadura cuenta con vecinos morosos, según el estudio de Mutua de Propietarios y la Cátedra de Vivienda de la Universidad Rovira i Virgili, de Tarragona que también refleja que un 43 por ciento de estas comunidades sólo realiza la reunió anual de carácter obligatorio.
La okupación (7%), los pisos turísticos (7%) o el acoso inmobiliario (4%) son ya algunas de las principales preocupaciones de las comunidades de vecinos de Extremadura, según recoge el estudio "Efectos de la crisis en comunidades de propietarios" realizado por la aseguradora Mutua de Propietarios en colaboración con la universidad tarraconense.
Junto a las clásicas inquietudes relativas a la conservación y mantenimiento del edificio (43%); las derramas (36%); los vecinos molestos (32%) o la morosidad (32%), la nueva realidad social trae consigo nuevos problemas.
De acuerdo con el estudio, en Extremadura, donde un 53 por ciento de los propietarios vive en comunidades con más de 20 vecinos, un 25 por ciento asegura haberse visto afectado mucho o bastante por la crisis.
Esta situación se ha materializado en el cambio a otros proveedores más económicos (62%), en un incremento del impago de cuotas (29%), en la realización de menos reformas (29%) y en un mayor endeudamiento.
De hecho, 6 de cada diez comunidades de vecinos de Extremadura afirman contar con vecinos morosos.
La investigación también destaca que los impagos no sólo obedecen a motivos económicos, puesto que un 25% señala que estos se realizan de forma intencionada y un 5% apunta a que se trata de pisos de propiedad bancaria que no hacen frente a las cuotas.
En términos de mantenimiento del edificio, en un 14 por ciento de las comunidades extremeñas se han demorado la realización de reformas, siendo la escasez de recursos económicos (25%) y la falta de acuerdo entre vecinos (25%) las principales causas de esta demora.
El estudio también señala que el 50 por ciento de los encuestados de Extremadura asegura haber pasado la Inspección Ténica del Edificio (ITE).
Otro de los aspectos recogido en la encuesta es que en un 32% de las comunidades de Extremadura existen problemas entre vecinos, siendo los de convivencia (11%), por deudas (18%) y los ruidos (7%) son los más frecuentes en Extremadura, aunque se resuelven en su mayoría de manera interna.
