La Junta de Extremadura aclaró ayer que el Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (SEPAD) está al corriente de los impagos de las nóminas de los trabajadores de la residencia de mayores Padre Damián de Plasenzuela y se ha ofrecido a intermediar para la búsqueda de soluciones. Además, aclaró que financia 41 plazas de este centro mediante un concierto con el ayuntamiento, no con la empresa privada a la que el consistorio ha cedido la gestión.

El PP, a través de la diputada regional Teresa Tortonda, denuncio ayer la "pésima" situación en la que se encuentra la residencia por la "mala gestión" del Ayuntamiento y la "dejación de funciones" de la Junta.

Desde el SEPAD aseguran que desde septiembre se mantienen reuniones puntuales con el consistorio y los gestores de la empresa para que garanticen la correcta atención a los usuarios.