Como si nunca se hubiera presentado aaquel examen de oposición en el que sacóun 9,3. La exconsejera de Sanidad y Dependencia María JesúsMejuto tendrá que volver a examinarse de la especialidad en Cirugía General y Aparato Digestivo si finalmente quiere lograr una plaza fija de cirujana en laAdministración pública tras declarar el Servicio Extremeño deSalud (SES) nulo el sobresaliente que obtuvo en las pruebas convocadas al final de su mandato, en julio de 2011.
Había doce plazas en juego, se presentaron 46 aspirantes y solo ocho sacaron másde un cinco en la prueba test. El secretario general del SES,César Santos, firma una resolución publicada ayer en el DiarioOficial de Extremadura, en la que se anula el acuerdo del Tribunal de Selección --del 20 de diciembre del 2013-- por el que se hace pública la relación de aspirantes que superaron el ejerciciode la fase de oposición de dichaespecialidad y que lideraba la exconsejera.
Esta decisión se toma meses después de que el SES acordara la suspensión temporal de este proceso hasta resolver losonce recursos de alzada presentados por otros aspirantes desde el día que se conocieron públicamente las notas, el pasado 20 deenero. Esos once recursos han sido admitidos parcialmente y se levanta la suspensión sobre el procedimiento con la anulaciónde la nota de Mejuto, a la que la nueva resolución insta a repetir el ejercicio en la fase de oposición mientras continúa adelante el proceso selectivo para el resto de aspirantes presentados. Las pruebas selectivas a lasque concurrió la exconsejera se convocaron en el DOE el día después de que Izquierda Unida anunciara su abstención para dejar gobernar a José Antonio Monago. Además, según denunciaron los populares el presidente del tribunal que valoró esas pruebas era un cargo político nombrado por la propia Mejuto, cuestión por la que el Gobierno regional decidió iniciar una investigación.Tras la publicación de esta resolución en el DOE de ayer, elconsejero de Salud y Política Social, Luis Alfonso Hernández Carrón, aseguró que "quien la hace, la paga" y justificó la decisiónde repetir solo el examen a la exconsejera socialista en que "no pueden pagar justos por pecadores‡". El consejero explicó queahora se nombrará un nuevo Tribunal de Selección "en el menor tiempo posible‡" que llevará a cabo las partes que faltan del procedimiento para el resto de los aspirantes: la baremación de los méritos, la publicación de las notas definitivas y la toma de posesión de las plazas. Este nuevo tribunal será también el encargado de examinar otra vez a Mejuto,si esta opta por presentarse.
La decisión del SES está basada en "una amplia jurisprudencia" sobre casossimilares, según Carrón, y se toma después de haber comprobado que Mejuto no concurrió alas oposiciones en condicionesde igualdad al resto de aspirantes, entre otras razones, porque se da la circunstancia de que el presidente del tribunal era uncargo político nombrado por ella misma. "La relación entreambos excedía de la meramente funcionarial" y se basaba en la"confianza", reseñó, aunquedejó claro que "no hay pruebasfehacientes" de que se le hubiera entregado el examen puesto que en ese caso hubiera habido "responsabilidades más graves incluso de carácter judicial".
Carrón insistió en que quienes han obtenido su puntuación de forma limpia no pueden verse afectados por irregularidades que solo apuntan a un caso particular y añadió que cada calificación es "un acto administrativo distinto". Para que los procesos públicos no puedan cuestionarse, trasladó ayer el compromiso de su Ejecutivo de garantizar "un acceso más justo, equitativo y transparente" a la administración pública salvaguardando los principios de "igualdad, mérito y capacidad", algo que se persigue con la nueva Ley de Función Pública.
De acuerdo a esta ley, recordó, "nunca más" un alto cargo podrá presentarse a oposiciones convocadas por él mismo o su gobierno, así como tampoco se podrá elegir "a dedo" a los componentes de un tribunal, que saldrán de un concurso público, y se reforzará el papel de observadores sindicales.
Por su parte, la exconsejera extremeña rehusó ayer hacer declaraciones, siguiendo la tónica habitual desde que se conocieran las notas del examen. No confirma si se presentará de nuevo a la prueba escrita como le insta el SES ni si optará por recurrir esta última resolución ante los tribunales, como estimó ayer el secretario regional del PSOE, Guillermo Fernández Vara, quien respeta el silencio de la exconsejera.
