El Servicio Extremeño de Salud (SES) pretende pasar de las 180.000 pulseras identificativas de pacientes del año 2016, con las que se evitan errores en la asistencia, a 800.000 pulseras en los próximos años, según ha anunciado el consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles.

"Esto que ya se venía realizando en recién nacidos es lo que queremos extender al resto de pacientes ingresados en el hospital o los que entran de forma ambulatoria en los hospitales de día", ha precisado el consejero.

El objetivo es mejorar la seguridad de los pacientes y, para ello, se ha puesto en marcha el Protocolo de Identificación Inequívoca de Pacientes del SES para este año 2017.

Según este protocolo, los fallos al identificar a los pacientes pueden provocar errores en la administración de medicamentos, en la realización de pruebas diagnósticas, errores de resultados analíticos por confusión de pacientes en las extracciones, errores en transfusiones de sangre o en intervenciones quirúrgicas.

Con este protocolo, ha dicho, se pretenden así evitar esos errores en relación con la identificación de los pacientes y "que no se realicen determinadas actuaciones, que no se tienen que realizar".

"Podemos conocer casos desgraciados de pacientes a los que se les ha hecho una intervención quirúrgica que no era la que tenía prescrita", ha manifestado.

Así, esta pulsera permite reconocer "de forma inequívoca" al paciente, al aportar su nombre, apellido, fecha de nacimiento y código de identificación personal, "que coincide con el de la tarjeta sanitaria y se vincula con su número de historial".

"Teniendo estas pulseras no nos puede caber ninguna duda", ha añadido.

Las pulseras identificativas deben ser de color verde con el logotipo del SES, texto en negro, letra común y tamaño legible. En el caso de pacientes pediátricos, son verdes y con motivos infantiles.

Se utiliza el distintivo de color amarillo para pacientes con alergias a medicamentos y/o alimenticias; y pulseras codificadas de color rojo para transfusión.