El Plan de Ordenación de Recursos Humanos del Servicio Extremeño de Salud vuelve a estar en el punto de mira. El gerente del SES, Ceciliano Franco, ya ha puesto sobre la mesa la necesidad de volver a modificar el apartado concerniente a las jubilaciones para afrontar las salidas que se producirán en los próximos años. Está previsto que entre 2020 y 2026 se jubilen alrededor de 600 médicos de familia de una plantilla que ronda los 1.200 profesionales, y además cerca de 400 facultativos especialistas.

«Con la normativa actual podemos movernos bien hasta el 2020 pero a partir de ahí la situación cambia. La entrada de sanitarios en el mercado laboral, sobre todo en medicina de familia, va a ser inferior a las salidas por jubilaciones y en ese momento tenemos que flexibilizar aún más las condiciones de jubilación, pero eso no será a corto plazo», explica el gerente del SES. Estima que esos cambios empezarán a negociarse con los sindicatos en este año para que pueda haber consenso el proximo año o en 2019.

Hasta entonces, Ceciliano Franco asegura que seguirá en marcha el acuerdo alcanzado el pasado verano con cuatro de los seis sindicatos con representación y que caduca en 2019. Ese acuerdo fija la jubilación del personal del SES en la edad legal establecida este año en 65 años y 5 meses y solo de forma excepcional autoriza prolongar la jubilación hasta los 67 años por necesidades asistenciales a aquellos sanitarios que voluntariamente lo soliciten y estén bien de salud. En tres meses el SES solo ha permitido prolongar su jubilación hasta los 67 años a cinco de los 45 profesionales que lo han solicitado.

«La solución será objeto de una negociación con los sindicatos, les diremos que lo que hay ahora como excepción se flexibilice de los 67 a los 70, que se pueda permitir la prolongación hasta los 67 de forma automática. Esa fue también nuestra posición de entrada pero no conseguimos negociarla», recuerda el gerente.

Franco defiende el marco actual porque ahora mismo, con un tasa de reposición impuesta que impide crear nuevas plazas de médicos, asegura que es la única forma de dar salida a los profesionales más jóvenes que se están formando en la comunidad. «Si no ocupan una jubilación no hay posibilidad de que se queden en el sistema, y si el médico joven se va, luego es difícil recuperarle», explica. «Ahora a la comunidad le interesa más tener ese sustituto asegurado que no buscarlo dentro de dos años, cuando va a haber una demanda generalizada porque el problema no es extremeño, es nacional y también internacional», apunta Franco, que insiste en que también hay profesionales sanitarios que piden jubilarse a los 60.

El actual Plan de Ordenación de Recursos Humanos del SES se aprobó en abril el 2015, pero tres meses después fue suspendido por el Ejecutivo socialista precisamente porque no compartía el acuerdo alcanzado en cuanto a la jubilación del personal, que hacía extensivo el retiro a los 65 años y solo excepcionalmente hasta los 70 años. «El acuerdo anterior era mucho más rígido», defiende Franco. Además, la propuesta que finalmente se acordó tampoco era lo que pretendía el SES, que a priori planteó la jubilación a los 67 años y flexibilizar la prolongación del servicio hasta los 70, pero los sindicatos no lo aceptaron. «Elegimos el mal menor para poder desbloquear el asunto».

De todas formas, este acuerdo que se revisará en los próximos meses, está pendiente también de la justicia. El sindicato CSI-F presentó un recurso contra el plan que ha sido admitido a trámite en el TSJEx. Simex también anunció que recurriría. «Nos parece bien que el SES esté pensando en flexbilizar las jubilaciones porque es lo que pedimos desde el primer momento», señala Emilia Montero de CSI-F. A su juicio la mejor opción es la que fija el Estatuto Marco, que permite prolongar la jubilación hasta los 70 años y lo deja en manos de la administración. El sindicato señala que el problema de falta de personal está causado por el límite de plazas MIR impuesto.

No obstante, el SES asegura que la flexibilización de la jubilación es una de las líneas que baraja para solventar el problema de asistencia que podría darse ante el número de jubilaciones previstas en los próximos años.