La próxima convocatoria de oposiciones del Servicio Extremeño de Salud (SES), que se publicará en el primer semestre del 2017, podría superar las mil plazas. El SES ha propuesto a los sindicatos ampliar el número total de plazas a concurso sumando las correspondientes a la oferta de empleo público (OPE) de 2017 -que debe aprobarse en febrero o marzo- lo que supondría entre 400 o 500 puestos más, estiman los sindicatos. La oferta total sería por tanto superior al millar de plazas, ya que la próxima convocatoria anunciada aglutina las ofertas de empleo público de los tres últimos años en los que no ha habido oposiciones: 38 plazas del 2014, 366 del 2015 y 486 plazas del 2016: 890 en total. A estas se podrían añadir las que se aprueben en 2017, entre 400 y 500.

No obstante, la normativa estatal fija que las convocatorias de oposiciones pueden aglutinar las ofertas de empleo público de tres años consecutivos, por lo que sumar las plazas de la OPE del 2017 podría suponer suprimir las 38 plazas del 2014, un número muy reducido puesto que entonces la tasa de reposición del personal impuesto por el Gobierno central no podía superar el 10%, es decir, solo se podía sacar a oposición una de cada diez jubilaciones o fallecimientos que se produjeron en el sistema. En el 2015 esa tasa se reposición se elevó al 50%, lo que permitió acumular más de 300 plazas y el año pasado el Gobierno fijo el 100% de reposición, lo que permitió aprobar una oferta con el total de las vacantes producidas ese año.

La posibilidad de perder esas 38 plazas del 2014 es la principal pega para el sindicato CSI-F. «Hemos perdido durante años muchas plazas por la injusta tasa de reposición y aunque sean pocas, no podemos permitirnos perder esas 38, espero que de alguna forma se puedan mantener», señala Emilia Montero, que ve positiva la propuesta del SES para poder lanzar una convocatoria más nutrida y potente. Más plazas y un ahorro económico para la administración, son los argumentos de UGT para apoyar el plan del SES. Felipe Bachiller espera que sea posible aglutinar las cuatro ofertas de empleos, mientras desde CCOO, Ángel Benítez cree que «es preferible perder 38 plazas y poder convocar 400 o 500 más».

Para Mª José Rodríguez, del Simex, es una propuesta postiva especialmente para los facultativos porque suelen contar con ofertas minoritarias y permitiría aumentarlas. Damián Cumbres, de Satse, cree que lo ideal es tener una oferta lo más cuantiosa posible.

De todas formas, los sindicatos aún esperan más si el Gobierno central elimina para el próximo año la tasa de reposición del 100%. «Sería lo más deseable para poder reducir la tasa de temporalidad que tenemos por herencia», apunta Bachiller. Apunta que antes de la crisis el 12% de los empleos en el SES eran temporales y actualmente está en el 27% y en algunas categorías supera el 30%. A su juicio sería necesaria una convocatoria de en torno a 1.800 plazas para poder reducir la temporalidad y dar estabilidad. El SES parece dispuesto a ofrecer esa convocatoria potente si el Estado le deja.

Pendientes aún de las plazas totales que se puedan convocar el año que viene, lo que sí parece claro es que hay acuerdo entre la administración y los sindicatos para intentar evitar, en la medida que se pueda, los conflictos surgidos en las ultimas oposiciones del SES. Para ello todas las partes quieren negociar un documento o pacto en el que se pongan plazos a la resolución de los procesos selectivos, con el fin de que no se alarguen en el tiempo tantos años como los últimos. Ese documento también incluirá medidas para evitar problemas judiciales con las oposiciones por las ambiguedades de las convocatorias, e incluso algunos proponen la posibilidad de liberar a los miembros de los tribunales para que se dediquen en exclusiva, de forma temporal, a resolver los procesos selectivos. Las centrales señalan que las oposiciones deben resolverse en año y medio y debe haber convocatoria de empleo cada tres años. «Lo de ahora es una barbaridad».