Establecimientos de calidad donde alojarse, pero también edificios para conocer la historia y el patrimonio artístico y arquitectónico del entorno donde se asientan. Ese es el objetivo que se ha marcado Paradores de Turismo con el proyecto de musealización de sus edificios históricos, una iniciativa que afectará a los siete paradores nacionales que esta sociedad de capital público tiene abiertos en Extremadura.

El primero en someterse a este proceso en España ha sido el Parador de Orense, ubicado en el antiguo monasterio de Santo Estevo. Y actualmente se están realizando los trabajos de adaptación en el de Santiago de Compostela, el Hostal de los Reyes Católicos. Los siguientes serán los de Granada, Cardona (Barcelona), Ubeda (Jaén), León, Oropesa (Toledo), Sigüenza (Guadalajara), Hondarribia (Guipúzcoa), Plasencia y Santo Domingo de la Calzada (La Rioja). "Pero aún no hemos establecido cuál va a ser el orden. La idea es musealizar estos nueve en los próximos dos años y posteriormente acometer el resto", explica Xescu Prats, responsable del proyecto.

Por tanto, en Extremadura, la iniciativa se estrenará en Plasencia. "Pero todos los establecimientos de esta región están ubicados en edificios históricos y, por tanto, será una de las pocas comunidades autónomas donde todos sus paradores van a ser paradores museo", aclaran desde la entidad.

EL PROCESO Para llevar a cabo esta musealización, la cadena realizará una investigación histórica del edificio, de las etapas de su arquitectura, de los antiguos usos del espacio del parador y de sus objetos, patrimonio, historias, leyendas y anécdotas. Con esa información se elaborarán un conjunto de placas informativas --en español e inglés-- que se distribuirán por el parador para que los clientes y turistas puedan recorrerlo y conocer la riqueza histórica, artística y arquitectónica del inmueble. Además se elaborará una guía de visita con planos del edificio y el trazado que deben seguir para acceder a la historia completa del monumento --el recorrido durará aproximadamente una hora--. De acuerdo con los plazos que maneja Paradores de Turismo, la fase de adaptación de cada establecimiento durará unos tres meses de media.

También los empleados recibirán un plan de formación para conocer el contenido de la visita y que puedan asesorar a los clientes. Y junto a esa información específica, se ofrecerán datos de interés sobre el entorno donde se asienta cada parador, sus valores turísticos o sus costumbres (gastronomía, folclore, economía...).

Según Xescu Prats, "pretendemos susurrar al visitante los secretos de cada edificio y que el alojamiento se convierta en toda una experiencia cultural". Así, por ejemplo, se desgranará la relación del parador de Jarandilla con el emperador Carlos V; que el hotel de Mérida conserva la estructura de un antiguo convento del siglo XVIII instalado sobre los restos de un templo romano dedicado a la Concordia de Augusto; o que el patio y el claustro del de Zafra, en el antiguo castillo de los Duques de Feria, fue reformado por el arquitecto Juan de Herrera, el mismo que se encargó de la construcción del Monasterio de El Escorial.