TNtadie mira con ojos de ver al Oeste. La peculiar situación política de Extremadura no pasa por ser un reflejo de sol al atardecer. Nos quedamos con lo que quema la luz y perdemos las formas, guardamos en la retina las siluetas, sin apreciar y sin ver al objeto.

La abstención se ha interpretado bajo versiones mayoritarias. Para Monago , una manera de sobrevivir en su mayoría minoritaria. Para Vara , el dichoso pacto PP-IU. Ambos dos insistiendo en un punto en común: quieren ver a IU como un satélite de sus deseos e intenciones. Para IU, siendo la versión original pero la menos oída, la abstención ha sido nuestra manera de marcar las diferencias con sus coincidencias políticas.

Convertido en rosa de sal, el PSOE quiere crecer con la estrategia del PP de Rajoy . El conciliador Vara que pactó sin necesitarlo una Ley de Educación autonómica con el PP, que abrazó la reforma constitucional del artículo 135 y que niega la consulta al pueblo en un referéndum sobre la Jefatura del Estado, se viste de justiciero y sale con el no por montera. Ha tomado la bandera del no por estandarte y en su peculiar cruzada no le importan los extremeños ni las extremeñas. Por lo menos no le importan los y las extremeñas que necesitan para sobrevivir el último recurso que supone la renta básica. Cierto que el PP ha roto el consenso de la Ley con el Decreto Ley, pero sobre todo por la aplicación lenta, torpe, ineficaz, torticera y hasta abyecta de la misma.

XDESDE LAx independencia de los dos polos del bipartidismo alguien tenía que plantear una salida sensata. A riesgo de equivocarse, de que la iniciativa no viese la luz por contar sólo con tres diputados, IU decidió entrar en el juego parlamentario de presentar enmiendas al texto del PP. Enmiendas sustanciales que van desde un aumento de la cuantía hasta la posibilidad de reconocer más de una unidad familiar cuando convivan en una misma vivienda. Estas enmiendas no han tenido el voto positivo del PSOE que sigue jugando al no. IU ha hecho lo que ha decidido. Ni las sesiones de parlamento en la calle, ni los hostigamientos de algún medio son lícitos para que se retuerzan las voluntades, ya no de las personas, sino de las organizaciones.

Ahora como en la ley del 2013 queda lo fundamental y eso depende de la gestión del Gobierno de Extremadura. Las rentas básicas tienen que llegar a los solicitantes con derecho, en el plazo más corto de tiempo.

Si la política es el arte de lo posible, IU Extremadura está haciendo equilibrios internos y externos. Internos por haber roto con el dictado y la tradición de apoyo al PSOE cuando necesitaba nuestros votos para gobernar. Un especie de anticipo del rechazo a la casta. Por fuera todo ha sido un mano a mano en el que las reglas del juego no contemplan la aparición de terceros que pueden alterarlo.