Ante "la gravedad de los hechos imputados, y el perjuicio que la imputación infiere a esta institución (Guardia Civil)", desde el Subsector de Tráfico de de la Guardia Civil de Cáceres, donde al agente J. A. M. estaba destinado en el momento de su detención, se remitió a la Dirección General de la Guardia Civil propuesta de "pase a la situación de suspenso de funciones, con cese en el destino" de este agente. La propuesta fue atendida y a J. A. M. se le abrió expediente sancionador por la presunta falta muy grave de "observar conductas gravemente contrarias a la disciplina, servicio o dignidad de la institución" y se le cesó.

Frente a ello, el abogado del Guardia Civil ha actuado remitiendo un escrito al director general de la Guardia Civil, en el que le suplica "la suspensión del expediente hasta tanto se dicte sentencia firme en el procedimiento penal". Y solicita, asimismo, se rectifique el párrafo de la propuesta de suspensión y cese que recoge que "en el momento de su detención, en el vehículo del agente, oculto en el compartimento existente entre los asientos delanteros, se intervinieron 8.610 euros", y 87.440 euros en su casa "al ser incierta semejante declaración, pues --asegura el letrado-- en su vehículo no se incautó ni droga ni dinero".