Las dos cajas de ahorros extremeñas siguen presentando buenas ratios a pesar de la crisis. Ambas ocupan posiciones por encima de la media en indicadores como los de solvencia, eficiencia y morosidad. Así, Caja Badajoz es la segunda caja con un mejor coeficiente de solvencia total (denominada ratio bis ) de toda España, apenas superada por la vasca BBK, conforme a los datos facilitados por la propia entidad de crédito.

La solvencia es, básicamente, la capacidad que tiene una empresa de hacer frente a sus deudas y obligaciones a corto y medio plazo. En el caso del indicador ratio bis , este se obtiene dividiendo los recursos propios ponderables con los que cuenta la entidad (capital, reservas, provisiones de insolvencia...) entre sus activos ponderados por riesgo (préstamos dados a los clientes, inversiones en renta fija y variable....). A mayor calidad de los activos, estos pesan menos en el denominado y, por tanto, el resultado es más elevado.

Caja Badajoz tenía, a fecha de 31 de diciembre pasado, un coeficiente de solvencia del 16,06%, algo más del doble de lo exigido por el banco de España, que es el 8% (es decir, que por cada 100 euros que se tengan en activos, haya al menos ocho de recursos propios). En este índice de solvencia Caja Extremadura está en el lugar 16 entre las 43 cajas españolas.

Fuentes de Caja Badajoz destacan la importancia de mantener este índice de solvencia en unos buenos niveles, ya que "en épocas de crisis la gente comienza a dejar de pagar y esto es lo que te permite salir adelante". Estas mismas fuentes explican que para conseguir unos índices de solvencia altos es fundamental seguir políticas de inversión en activos de calidad y reforzar de manera adecuada los recursos propios (al no repartir dividendos, los beneficios de las cajas deben destinarse bien a obra social --como máximo un 50%-- o bien a recursos propios).

En otro índice, el de la eficiencia recurrente, es Caja Extremadura quien lidera (también con datos de diciembre pasado) a las cajas españolas, mejorando el segundo puesto alcanzado en el 2007. Con un 39,19%, la entidad que preside Jesús Medina es la única que consigue niveles inferiores al 40% en este indicador, y se mantiene 21,38 puntos porcentuales por debajo del 60,57% que presenta el conjunto de las cajas de ahorros.

La eficiencia de una entidad bancaria se establece por la relación existente entre los ingresos que obtiene y los gastos en que incurre para alcanzar dichos ingresos. Por tanto, cuanto menor es el resultado, mejor. En el caso de la eficiencia recurrente, se aclara desde Caja Extremadura, "se elimina cualquier tipo de resultado extraordinario", entendiendo por tales todos aquellos que no se derivan directamente del negocio típico de la entidad, como son los resultados por operaciones financieras o las fluctuaciones por el cambio de valor de las divisas, factores que tienen "un elevado componente de volatilidad y que si se incluyen desvirtúan los análisis sobre eficiencia realizados". En este ránking, Caja Badajoz ocupa el lugar número quince.

Por último, en el caso de la morosidad --proporción de créditos de dudoso cobro sobre el total--, Caja Extremadura aparece de nuevo por encima de la media, con un 2,71% en el puesto diecisiete, mientras que Caja Badajoz figura justo por detrás, con un 2,92%.