El Tribunal Supremo (TS) ha ratificado la sentencia de la Audiencia Nacional en la que justifica el despido colectivo presentado por el Grupo Gallardo para las plantas de Ferromallas y Grupo Alfonso Gallardo (Extremadura).

El TS, que extiende dicha justificación de despido colectivo a Corrugados Azpeitia y Corrugados Lasao (País Vasco), entiende que las medidas tomadas "se adecúan a la intensidad de las causas".

A juicio de la empresa, esta sentencia, a la que EFE ha tenido acceso, avala la gestión y los sacrificios que tanto el Grupo como la plantilla han realizado para "salir de la crisis".

Según el grupo empresarial, el sector siderúrgico nacional, "con una sobrecapacidad instalada", necesitaba llevar a cabo una serie de ajustes que "sólo el Grupo Gallardo ha realizado y ha sabido gestionar, con mínimos recursos, de manera satisfactoria".

Estos ajustes le han permitido que vuelva al entorno de la rentabilidad con unos resultados operativos satisfactorios en el primer semestre de 2015.

El Grupo Gallardo ha lamentado que los empleos perdidos no puedan ser absorbidos por otros proyectos, grandes generadores de empleo en Extremadura y en España, "como es el de Refinería Balboa que, de manera incomprensible, sigue en el limbo administrativo".

Este proyecto, en opinión de este grupo empresarial, evitaría la situación de "oligopolio" nacional denunciada por la Comisión Nacional para el Mercado y la Competencia (CNMC).