Los talleres de automóviles de Extremadura pierden 4,9 millones de euros anuales por el abandono de vehículos en sus instalaciones, que se cifran en unos dos mil, según la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (GANVAM).

En el conjunto del país, las pérdidas se elevan a 190 millones de euros y en más de 75.000 los vehículos "olvidados" por sus propietarios una vez reparados o aún pendiente de arreglo, cuyo perfil se corresponde en el 90% de los casos con vehículos con un precio en torno a los 1.000 euros y una edad de entre los ocho y diez años.

En la provincia de Badajoz, más de 1.200 vehículos fueron abandonados en el último año, lo que supone unas pérdidas de 2,9 millones de euros anuales para los talleres de la provincia si se tiene en cuenta los gastos de estacionamiento y reparación no abonados derivados de esta práctica "cada vez más frecuente".

En la de Cáceres, se abandonaron 859 vehículos y los gastos se situaron en dos millones de euros.

Sin embargo, Extremadura se situó, con más de 2.000 vehículos, entre las regiones con menor número de abandonos de vehículos en los talleres, por delante de Asturias (2.014), Cantabria (912) y La Rioja (579), entre otras.

Según Ganvam, el importe medio de la reparación de estos vehículos ronda los 1.200 euros y supera muchas veces su valor de mercado, por lo que, rara vez suele compensar al usuario su arreglo.

Ganvam, que representa a más 5.000 empresas de la reparación y mantenimiento, explica que si bien el abandono de los vehículos en los talleres es un problema "crónico" del sector, en este último año se ha visto acentuado por la crisis económica.

Cada vez, explica, son más los usuarios que no pueden hacer frente a su factura del taller o que sencillamente no encuentran rentable la reparación de sus viejos automóviles.

Estos vehículos se abandonan en las instalaciones por un tiempo medio de unos tres meses que en ocasiones puede sobrepasar incluso los cuatro años, produciéndose situaciones tan peculiares como las protagonizadas por empresas en quiebra o matrimonios "mal avenidos" que prefieren que sus vehículos, generalmente de alta gama, corran mejor suerte en el taller.

En la actualidad, el taller es depositario de los vehículos que entregan los clientes y, como tal, tiene el deber de guardia y custodia, lo cual dificulta que pueda desprenderse de ellos transcurrido un periodo prudencial de tiempo.

Por este motivo, los talleres optan por mantener los vehículos en sus instalaciones por tiempo indefinido con los "sobrecostes" que esto supone si se consideran los gastos de estacionamiento (unos 109 millones anuales) y reparación no abonados (unos 80 millones anuales).

Hasta la fecha, las medidas que vienen aplicando los talleres para la retirada de estos coches son "complicadas" o "poco efectivas", a través de la apertura de un procedimiento judicial para solicitar la subasta del vehículo cuando el importe de la factura es muy elevado o, directamente, el estacionamiento del automóvil en un aparcamiento o vía pública previa comunicación al propietario.

El estudio de Ganvam señala que las regiones donde se registraron más abandonos de vehículos coincidieron con aquéllas con mayor número de talleres y parque automovilístico.

De esta forma, Cataluña y Andalucía se situaron a la cabeza, con 12.206 y 11.060 coches abandonados, respectivamente. La Comunidad Valenciana, con 10.032 coche; la Comunidad de Madrid, con 7.624, y Galicia, con 5.722 vehículos, se sitúan también entre las regiones más afectadas por esta práctica.

Los talleres de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla fueron los que menos abandonos registraron en sus instalaciones, contabilizando 161 vehículos. También se sitúan a la cola regiones como La Rioja, con 579 coches abandonados; Cantabria, con 912 y Navarra, con 1.011 vehículos.

Ganvam, que ha venido pidiendo reiteradamente una solución a las distintas Administraciones Públicas, alaba la "trascendental" modificación de la Ley de Seguridad Vial, ya que prevé que la retirada del vehículo al desguace se produzca en el plazo de un mes desde que la Jefatura Provincial de Tráfico lo comunique al propietario, si éste no retira el vehículo y abona la factura.