El Tribunal de Cuentas ha advertido de un crecimiento del gasto sanitario autonómico, que supone una situación financiera «insostenible» a largo plazo, y ha hecho especial referencia al Servicio Extremeño de Salud (SES) por sus concertaciones, «no amparadas en conciertos o contratos».

Así lo manifestó ayer el presidente del Tribunal de Cuentas, Ramón Álvarez de Miranda, durante su comparecencia en el Congreso para informar sobre la fiscalización de varias comunidades autónomas durante el ejercicio del 2015.

Álvarez de Miranda afirmó que existe un «efectivo problema» en la financiación del sistema sanitario, que tiene unas necesidades crecientes con unos recursos que no son suficientes, quizás «por falta de acuerdo o problemas derivados del sistema de financiación autonómica», apuntó, sobre el modelo pendiente de reforma.

También se referió a la «falta de control» del gasto farmacéutico, por lo que apuntó la posibilidad de realizar un informe específico sobre esta cuestión a nivel global para hacer comparaciones de gestión entre las diferentes autonomías.

Eso sí, ninguna de ellas ha cumplido con los objetivos de déficit, ya que superaron el 0,7% del PIB, o la regla de gasto, aunque cumplieron con el objetivo de deuda.