El Teléfono de Atención al Mayor de Extremadura --900 84 70 70-- ha recibido en sus dos años de funcionamiento 1.533 llamadas, la mayoría de ellas consistentes en peticiones de información sobre servicios y ayudas económicas para la tercera edad. En la actualidad el teléfono se ha convertido en una vía de denuncia para los mayores y sus familiares sobre deficiencias en los servicios de los centros de mayores, malos tratos y abusos en el ámbito familiar, según explica el sociólogo del Servicio de Atención a Mayores de la Junta de Extremadura, Javier Alvarez.

Las llamadas suelen proceder de los hijos de los ancianos y en ellas denuncian aspectos generales como el mal funcionamiento de las instalaciones, la falta de personal o una atención inadecuada. Unas denuncias, que según ha explicado Alvarez, son transmitidas a los inspectores de residencias geriátricas dependientes de la Junta para que actúen en consecuencia. Las llamadas han seguido un ritmo constante durante los dos años de vida del servicio y la mayoría han sido de información sobre servicios y ayudas económicas.