Siempre con un ojo mirando al cielo y otro puesto en la cosecha. Y siempre con el temor de que la lluvia no llegue como se espera. Los agricultores extremeños han sufrido, de nuevo, las inclemencias del tiempo. Esta vez un temporal de lluvia y granizo ha dañado la cosecha de hasta doce localidades de las Vegas del Guadiana, afectando principalmente al tomate y los frutales. Según el primer balance de la Consejería de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, se han visto afectados 12 municipios de esta zona. En la provincia de Badajoz, Torrefresneda, Santa Amalia, Guareña, Orellana, Mérida, Montijo, Talarrubias, Olivenza y Villafranca de los Barros. En la de Cáceres, Miajadas, Almoharín y Pizarro. «Los técnicos van a visitar las zonas en los próximos días para hacer un diagnóstico específico del terreno afectado. El granizo cayó muy desperdigado y con intensidad muy variable», indican desde la consejería.

Ángel García Blanco, portavoz del Consejo Agrario, sí da una primera cifra de terreno deteriorado: habla de más de 3.000 hectáreas de, principalmente, tomate y frutales. «Lo que no tenemos claro es el maíz, hay que esperar un poco para ver la evolución y saber si se salva», asegura. Y añade: «Va a seguir lloviendo, pero el problema no es la lluvia, el problema ha sido el intenso granizo».

La titular de Agricultura, Begoña García Bernal, se apresuró a recordar que «lo primero que deben hacer los afectados es llamar a Agroseguro para que se lleve a cabo la peritación».

Desde la organización agraria Apag Extremadura Asaja lamentaron los «cuantiosos daños» del temporal pero quisieron ser prudentes a la hora de valorar los efectos reales.

En Upa-Uce insistieron en que frutales, tomate, cereza, cereales, hortícolas (principalmente el melón) y patata han sido los más afectados por la tromba de agua y granizo que ha causado tanto pérdidas como inundaciones. «Las previsiones es que va a seguir lloviendo, tenemos avisos de alerta amarilla en la provincia de cacereña por tormentas y fuertes lluvias, por lo que la situación podría empeorar», subraya Ignacio Huertas, secretario general de esta organización. «Muchas de las explotaciones dañadas de las Vegas del Guadiana ya sufrieron las tormentas de granizo del mes de julio, de manera que es una catástrofe para el agricultor», incide Huertas.

EN el JERTE / Importantes daños también ha sufrido la cereza en el norte de la provincia cacereña. Según García Blanco hay unas 400 hectáreas afectadas. Upa-Uce habla de pérdidas en explotaciones de Tornavacas, Garganta la Olla, El Torno, Rebollar y Pasarón de la Vera. «Ya hubo problemas en la floración con las nevadas de abril y con el granizo de la pasada semana, una situación que se agrava por el bajo nivel de aseguramiento del cultivo», recuerda Huertas.

Asimismo, desde otro de los municipios más afectados, Gargantilla, su alcaldesa, Dolores Peña, pide la declaración de zona catastrófica «porque las pérdidas son graves». «Esto es un municipio de 400 habitantes que vive de la cereza y la ciruela claudia, y está todo destrozado. Es la principal actividad económica que tenemos y nos hemos quedado sin ella».

En la misma línea llega la queja desde Casas del Monte: «Las inclemencias del tiempo están menguando considerablemente la cerecera en el Valle del Ambroz. Son miles de kilos que se han perdido. Mientras esto ocurre seguimos presenciando una vez más por parte de las administraciones una mirada fijada en el Jerte mientras el Ambroz pasa desapercibido. Las cooperativas de Casas del Monte o Gargantilla, alguna con más de 50 años de antigüedad, no reciben las ayudas que sí consiguen otros municipios», lamentan desde el grupo municipal de Podemos.

INTENSA LLUVIA EN PIORNAL / La localidad cacereña de Piornal ha sido la extremeña más lluviosa los dos últimos días, ya que entre el jueves y el viernes se han recogido 72 litros por metro cuadrado. Tras ella se han situado otras dos poblaciones del norte de Cáceres: Valverde del Fresno y Nuñomoral, con 66 y 65,2 litros por metro cuadrado, respectivamente, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). A continuación se ha colocado Garganta la Olla, con 64 litros.

Se espera que las precipitaciones continúen durante el fin de semana. Los agricultores seguirán, pues, con un ojo en el cielo y otra en la cosecha.