Las inspecciones llevadas a cabo el año pasado en Extremadura por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales desvelan un importante incremento de la contratación de extranjeros sin papeles . De hecho, en los primeros nueve meses del 2004 --son los últimos datos oficiales-- se localizaron 136 inmigrantes trabajando en situación irregular, un 30% más que en todo el año anterior. Esto supone, además, que el 2004 fue el año en el que Extremadura registró más casos de este tipo, es decir, de extranjeros que son contratados pese a no tener permiso de trabajo.

Además, se da la circunstancia, según el informe facilitado por el ministerio al Congreso de los Diputados y al que ha tenido acceso EL PERIODICO EXTREMADURA, de que aumentaron las irregularidades a pesar de que se redujeron sensiblemente las inspecciones en este ámbito. En concreto, en los primeros nueve meses del año pasado se llevaron a cabo 184 actuaciones por las 265 de todo el año anterior, pese a lo cual se detectaron 136 infracciones, 31 más que en el 2003 (101).

Por lo que se refiere a las sanciones económicas, se han incrementado también de manera sensible hasta alcanzar los 835.000 euros, un 35% más que en todo el ejercicio anterior.

CIFRA RECORD Para tener clara la importancia de esta cifra récord hay que tener en cuenta que en los últimos años se habían disparado las inspecciones y, aún así, sólo se habían detectado 218 casos en un periodo de cinco años.

Es posible que esta mejora de la efectividad se deba al plan aprobado hace dos años por el propio ministerio para centrar los controles en determinadas campañas agrícolas consideradas sospechosas . En el caso de Extremadura se marcaron como objetivos prioritarios las campañas agrícolas del tomate, la aceituna y la vendimia en Badajoz, y del tabaco, el pimiento y el espárrago en Cáceres.

Aflorar este empleo sumergido es, precisamente, uno de los objetivos de la campaña extraordinaria de regularización de inmigrantes puesta en marcha por el Gobierno de Zapatero.

"ULTIMA OPORTUNIDAD" En este sentido, el Ejecutivo ha dejado claro que se trata de "la última oportunidad" para que los empresarios puedan hacer contratos legales a los inmigrantes que hasta ahora no tenían permiso de trabajo. Así, los empresarios que tengan como trabajadores a inmigrantes en situación irregular pueden acudir a las oficinas autorizadas por el Gobierno para solicitar que se les conceda un permiso de trabajo.