El histórico tren ‘Prestige’, que en estos días recorre Extremadura con la reivindicación de un tren digno como trasfondo, inició ayer en Mérida una nueva etapa camino al poblado ferroviario Malpartida-Arroyo, a la que se sumó la consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, Begoña García Bernal. La titular de Transportes de la Junta exigió al nuevo Gobierno una mejora completa de la línea ferroviaria.

García Bernal señaló que la ciudadanía extremeña «no puede ser más que nadie, pero tampoco menos», y para ello se necesita un «tren digno ya» que permita fortalecer todos los sectores regionales, especialmente el agroalimentario y el turismo. Según la consejera, tras la manifestación celebrada en octubre en Badajoz y la reunión de Fernández Vara con el ministro de Fomento, se seguirá con acciones reivindicativas, la próxima en Cáceres.

El tren Prestige es propiedad de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles y su recorrido por la región ha sido una iniciativa impulsada por la Asociación Extremeña de Amigos del Ferrocarril con motivo de la celebración del 150 aviersario del ferrocarril Ciudad Real-Badajoz.

El presidente de la Asociación, Angel Caballero, explicó que en el trasfondo de la actividad subyace la reivindicación de que Extremadura pueda contar con una infraestructura adecuada que permita la circulación de trenes con las mismas caracerísticas que en otras regiones. Señaló que este tipo de eventos «despierta la afección» por el tren. Como ejemplo citó su llegada a poblaciones como Cabeza del Buey o Villanueva de la Serena, donde «el pueblo se volcó para ver el tren» porque se está muy necesitado de una infraestructura adecuada.