La consejera de Presidencia, María Antonia Trujillo, afirmó ayer que es preciso "permanecer vigilantes" para preservar la integración social de los inmigrantes en Extremadura, "sobre todo cuando el Gobierno promueve y aprueba leyes regresivas para los derechos fundamentales".

Trujillo hizo esta afirmación en Mérida, donde inauguró las jornadas Multiculturalidad y Extranjería, organizadas por la Junta para "evidenciar nuestro compromiso con la formación permanente de los empleados públicos y con los problemas de la comunidad autónoma, que ha pasado de generar emigrantes a recibirlos", según recoge Efe.

La consejera señaló que en Extremadura "se cumple razonablemente bien" el objetivo de integrar a las personas procedentes de otros países, fundamentalmente a los marroquís establecidos en la zona de Talayuela.

Explicó que se han producido avances en la eliminación de las discriminaciones "injustas", se ha acercado la prestación de diversos servicios a estas personas y a sus familias.

También se ha trabajado, continuó, en la erradicación de los fenómenos de explotación de los emigrantes "y, en definitiva, en la lucha denodada contra el racismo y la xenofobia". Por contra, subrayó, el Ejecutivo central vulnera los derechos fundamentales de los inmigrantes y sus familias cuando plantea leyes como la que "limita su disfrute a quienes tienen autorización de estancia o residencia".