La Federación de Trabajadores de la Enseñanza (FETE) de UGT Extremadura comenzó ayer una campaña de recogida de firmas por el mantenimiento de la jubilación en los 60 años para los profesores no universitarios, y otra para reducir las ratios en las aulas. Dos cuestiones que, a su juicio, redundarán en mejorar la calidad de la educación.

Las campañas fueron presentadas en rueda de prensa por el secretario regional de FETE-UGT, Miguel Salazar, y el de Organización y Comunicación, Fernando Moreno. El primero explicó que, según una disposición de la Ley Orgánica de Educación (LOE), la jubilación a los 60 años para los profesores con 30 de servicio finalizará en el 2011, si no se prorroga indefinidamente.

El mantenimiento de esta medida, según el sindicato, es un reconocimiento a la labor docente y al desgaste de la profesión, y traerá consigo un rejuvenecimiento de la plantilla y una fuente de creación de empleo. Y el acceso de nuevos profesores más preparados, según Salazar, permitirá afrontar el papel "clave" que se da a la educación para el cambio de modelo productivo.

Por otro lado, FETE-UGT propone unas ratios de 7 alumnos en el primer ciclo de infantil, 15 en el segundo, 20 en Primaria, 22 en Secundaria y 25 en Bachillerato. Según el sindicato, las ratios en Extremadura están por debajo de las fijadas oficialmente --25 alumnos en Infantil y Primaria y 30 en Secundaria y Bachillerato--, y que se superan en poblaciones medias y grandes. Esta medida permitiría, según FETE, una atención más personalizada, avanzar en la lucha contra el fracaso escolar e incrementar la plantilla de profesores.