El Centro Extremeño de Reproducción Humana Asistida aplicó el año pasado tratamientos de fertilidad a 214 parejas de la comunidad autónoma. El resultado, un total de 65 embarazos (con una tasa de eficacia del 30%), 40 de ellos logrados a través de inseminación artificial y 25 por fecundación in vitro , según avanzó ayer la Consejería de Sanidad y Consumo del Ejecutivo regional.
Esta unidad, ubicada en el Hospital Materno Infantil de Badajoz, fue inaugurada el año pasado y ofrece diversas técnicas para provocar embarazos, además de otros servicios como un banco de semen destinado especialmente a enfermos oncológicos.
A lo largo del 2005 por la consulta de este centro pasaron por primera vez 627 parejas, algunas de las cuales pasaron a integrar una lista de espera que estaba formada a finales del año pasado por 320 familiar.
El área de salud de Badajoz, con 149 parejas, es la que más personas aporta a la lista de espera, seguida de las de Cáceres (37), Mérida y Don Benito/Villanueva (con 36 cada una). La mayoría de estos pacientes pendientes de tratamiento tiene entre 30 y 38 años, según los datos de la propia Consejería.
A estos que están en lista de espera se suman los 174 que estaban en tratamiento al finalizar el 2005 y otras más de 1.000 personas cuyos casos están siendo estudiados por los técnicos en sus fases previas.
LOS OBJETIVOS Aún así, la actividad del centro aún está lejos de funcionar a pleno rendimiento. Según explicó durante su inauguración --en abril del 2005-- el responsable de la unidad, Francisco García Malpartida, la previsión apunta a que se atenderán unas 11.000 consultas anuales, mientras que cada año se llevarán a cabo 600 inseminaciones artificiales.
Hasta la puesta en marcha del Centro Extremeño de Reproducción Humana Asistida, las parejas extremeñas que solicitaban este servicio al sistema sanitario eran desviadas a otras comunidades, especialmente Madrid y Castilla-La Mancha pero también más lejanas como Comunidad Valenciana, donde sufrían demoras superiores a los dos años.
Los estudios llevados a cabo en España apuntan que en torno a 15.000 mujeres extremeñas pueden tener dificultades a la hora de tener hijos. En los últimos años la tasa de infertilidad no ha variado, pero sí que se ha incrementado notablemente la demanda de estos servicios, una situación causada, entre otras cosas, por el retraso en la edad elegida para la maternidad, que supera los 30 años y en muchos se acerca a la cuarentena.
