El secretario técnico de la organización profesional agraria La Unión Extremadura, Luis Cortés, culpó ayer durante una rueda de prensa en Mérida al Consejo Regulador de la Denominación de Origen (DO) Ribera del Guadiana de causar la pérdida de 22,5 millones de euros a los productores de uva de la región.

El secretario de La Unión aseguró que «a pesar de que en la región haya un 87,8 por ciento de superficie de viñas acogidas a ‘marcas de calidad’ , solo el 17,14 por ciento del vino producido califica dentro de ellas». Asimismo, Cortés ha explicado que «Extremadura cuenta con 78.106 hectáreas de viñas de producción, de las cuales más de 37.232 se encuentran registradas en la DO Ribera del Guadiana y 31.336 registradas Indicación Geográfica Protegida (IGP). De los más de 3 millones de hectolitros de vinos producidos en Extremadura, solo se calificó como DO o IGP en torno a 600.000, el 17,14 % de la producción total».

En este sentido, Cortés ha apuntado que «en regiones como La Rioja, Castilla y León, Navarra o País Vasco, se suele calificar cantidades cercanas a la totalidad de la producción». En esta línea ha asegurado que «Extremadura es la única Comunidad Autónoma en la que el precio de la uva calificada es más bajo que el de aquella uva que no está acogida a ninguna de estas denominaciones».

Para conocer el importe de las pérdidas, La Unión ha utilizado como referencia los precios de Castilla la Mancha, que es la comunidad autónoma de España en la que más barato se paga la uva calificada: 15 céntimos de euros más cara que la uva sin calificar. De esta manera, ha declarado la organización «si solamente se calificase el 50 por ciento de la producción de superficies inscritas en estas denominaciones, el valor de la uva experimentaría un aumento de 22,5 millones de euros. Aunque si se compara con otras comunidades, la diferencia puede llegar hasta los 60 céntimos».

Cortes ha explicado que «estas cifras muestran la inutilidad de la dirección de la Denominación de Origen Ribera del Guadiana, que no da un valor añadido a las uvas recolectadas en su ámbito y es incapaz de calificar las producciones». El secretario ha exigido el «cese imediato del Consejo Regulador» y ha pedido la convocatoria de elecciones para que esta DO esté dirigida por personas con una ‘mayor capacidad».