La organización agraria UPA-UCE destacó ayer que la futura empresa de segunda transformación de tomate que la empresa Codytsa instalará en Miajadas (Cáceres) es "una importante apuesta de futuro que hacen los agricultores, a pesar de la crisis que atraviesa el sector en la actualidad", según ha manifestado el secretario general de la organización en la región, Ignacio Huertas.

El dirigente agrario avala "la apuesta que hacen los agricultores, acompañados de la administración, impulsores del proyecto con un 40 por ciento del capital, es decir, con una inversión de unos ocho millones de euros".

A su juicio, esto hace que la iniciativa "sea firme y comprometida con el futuro del cultivo en la región, ya que esto supondrá un impulso al desarrollo económico y social de Extremadura". Los tomateros, según Huertas, invierten en el futuro a pesar de las dificultades que sufre el sector.

En este sentido, explica que el presente año está siendo muy difícil para la mayoría de los agricultores de las Vegas del Guadiana (Badajoz) que se han visto afectados por las tormentas y el pedrisco, que han mermado la producción que ha supuesto pérdidas de renta. Además, las penalizaciones en las ayudas de la UE y la bajada del precio del tomate "han complicado aún más la situación".

SITUACION COMPLICADA A este respecto, manifiesta su preocupación por la situación del sector del tomate en los años 2006 y 2007, pero aclara que siguen "luchando para que tanto las administraciones regionales como las nacionales y la Unión Europea pongan encima de la mesa medidas económicas transitorias".

Además, reclama que, si no es así, se adelante la OCM de frutas y hortalizas "para que el cultivo del tomate pueda seguir produciéndose con las mismas garantías económicas que las del resto de países productores de tomate de la Unión Europea".

Con una inversión cercana a los 20 millones de euros, la nueva industria permitirá comercializar cien millones de kilos de tomate transformado y emplear en una primera fase a unos 50 trabajadores.

Del total del tomate transformado que la nueva empresa comercializará, en formato lata, cristal y tetra-brick, un 60 o 65% será triturado y un 35% frito, aunque esos porcentajes los irá marcando el mercado.

Extremadura es la primera productora de España en el sector, con 216 millones de kilos de tomate concentrado al año, y este proyecto industrial asumirá la segunda transformación.