La propuesta para la reforma de la Política Agraria Común (PAC) aprobada por la Comisión Europea esta semana, que contempla el recorte de ayudas directas a los agricultores y el fin de las subvenciones acopladas a la producción --entre otras medidas--, supondría unas pérdidas cercanas a los 300 millones de euros entr eel 2009 y el 2012 para los agricultores extremeños, según las estimaciones realizadas por la Unión de Pequeños Agricultores (UPA-UCE).

El secretario regional de la organización agraria, Ignacio Huertas, volvió a poner de manifiesto ayer en Cáceres el rechazo frontal del sector a los planteamientos de Bruselas. Bajo su punto de vista, esta propuesta supone un paso más en el desmantelamiento de la política agrícola comunitaria y no da respuesta a los nuevos problemas del sector: el incremento de los costes de producción y el aumento de la demanda de alimentos. Más bien al contrario, "favorecerá aún más la especulación y el problema de los márgenes comerciales".

Una de las iniciativas de la Comisión Europea es aumentar el porcentaje de fondos destinados a políticas de desarrollo rural que se obtienen de las ayudas a la agricultura y la ganadería. En este sentido, según UPA-UCE, afectará principalmente a las explotaciones familiares de la región, "que son las que generan riqueza y empleo en zonas de Extremadura donde no hay otra alternativa". Concretamente, la organización estima que esta medida supondrá un recorte en las ayudas superior a los 150 millones de euros entre los próximos cuatro años. A ello habría que sumar otra cantidad similar por la modificación del artículo 69 de la PAC, que contempla fondos para favorecer y mejorar cultivos o superficies que se encuentran en una situación de dificultad.

LOS CAMBIOS. La intención de la Comisión es elevar el porcentaje de dinero trasvasado a iniciativas rurales --que ahora es el 5% de las ayudas a los agricultores-- hasta alcanzar al menos el 13% en el 2012. Esto supondría un recorte de los subsidios directos para cerca de 21.000 productores extremeños que reciben subsidios comunitarios superiores a los 5.000 euros anuales. Aquellos que cobran rentas de más de 300.000 euros sufrirían rebajas de hasta el 22%; los que están entre 200.000 y 300.000 euros, un 19%; un 16% en el caso de quienes ingresan entre 100.000 y 200.000 euros; y un 13% para los que reciben de 5.000 a 100.000 euros cada año.

Para Ignacio Huertas, a la espera de que en los próximos meses el Consejo de Ministros de Agricultura de la UE revise el documento y lo apruebe, la reforma llevaría a la desaparición de "muchas" explotaciones por falta de rentabilidad. En este sentido, manifestó que "bajo ningún concepto" se puede recortar el apoyo público a las explotaciones profesionales e instó a Bruselas a llevar a cabo una política que luche contra el incremento espectacular de los precios en los medios de producción.