UPA-UCE de Extremadura solicita la declaración de zona catastrófica para las comarcas extremeñas que se han visto afectadas por las tormentas de lluvia y granizo que cayeron el pasado lunes, aproximadamente unas 4.000 hectáreas, informa la agencia Efe.La asociación de agricultores señala que las fuertes granizadas "han perjudicado gravemente" a los cultivos de olivar, viña, tomate, frutal, melón, sandía y cereza de la comarca de Vegas Altas, de municipios como Santa Amalia, Don Benito y Guareña, y a otras del entorno de Mérida como Arroyo de San Serván, Villagonzalo, La Zarza y Calamonte.En la provincia de Cáceres afectó a zonas de Campo Lugar, Miajadas y Pasarón de la Vera.Como consecuencia de este pedrisco, muchas explotaciones han sufrido cuantiosos daños, lo que supone la pérdida de las cosechas de esta campaña para cientos de agricultores de la región.Además de esto, para los fruticultores, olivareros y viticultores esta situación también trae como consecuencia el incremento de costes necesarios para la reparación de las plantas que en muchos casos se han visto afectadas y que necesitan sus correspondientes tratamientos para su mantenimiento de cara a la próxima campaña.Por este motivo, UPA-UCE exige "que se tomen medidas de carácter urgente para evaluar y cuantificar con la máxima precisión y celeridad posible la magnitud de estas pérdidas" y que se pongan en marcha las medidas de carácter económico, social y político necesarias para auxiliar a todos los agricultores afectados que "están pasando por esta difícil situación".