UPA-UCE Extremadura ha reclamado recuperar el seguro de la cereza para los agricultores del Valle, ante una campaña «desastrosa» debido a la adversa climatología, y revisar el seguro por compensación de pérdida de pastos, que «actualmente no está respondiendo» a los ganaderos y cerealistas.

Ayer se reunió la Comisión Territorial de seguros agrarios, en la que participaron organizaciones agrarias, Cooperativas, la Consejería, ENESA y Agroseguro.

En el encuentro se analizaron determinadas líneas de seguros agrarios para ver las modificaciones pertinentes y consensuar la posición de Extremadura en torno a sectores estratégicos, según informó UPA-UCE que, por su parte, ha planteado revisar las dos citadas «líneas fundamentales para la región».

El secretario general de UPA Extremadura, Ignacio Huertas, afirmó que el seguro de la cereza «no funciona» ya que actualmente el nivel de aseguramiento se sitúa «por debajo del 15%».

«Los agricultores aseguraron durante una serie de campañas y después dejaron el seguro porque no lo pueden pagar», explicó Huertas, quien aludió a la particularidad y singularidad de las explotaciones cereceras.

Según Huertas, actualmente los costes de este seguro «multiplican por tres o por cuatro» el valor de la producción asegurada y, en este sentido, UPA-UCE propone bajar los costes del seguro para que sea «más asequible» a los cultivadores.

Igualmente, pide soluciones a los problemas existentes con el seguro de compensación por pérdida de pastos, ante la «alarmante» situación de sequía que vive el campo extremeño.

Huertas destacó que el nivel de aseguramiento de esta línea en Extremadura «es el más alto del país» y, sin embargo, cuando llega el momento de que el seguro responda a los productores «este seguro no funciona».

Ha citado como ejemplo el caso de un ganadero de vacuno de la comarca de Coria en una explotación con 100 vacas, cuyo seguro tiene un coste de unos 2.300 euros. Las pérdidas en estos últimos meses se elevan a 6.000 euros, pero la indemnización se sitúa en el entorno de los 2.200 euros, una cantidad que indica no cubre el coste del seguro.

Por ello, la organización agraria exige que se corrijan estas «incoherencias», para evitar el abandono del seguro agrario por parte de los productores.