La organización agraria UPA-UCE de Extremadura calificó ayer el 2005 como un año "muy complicado" para la agricultura y la ganadería, que ha hecho frente a problemas como la sequía, la lengua azul , la subida del precio de gasóleo y los cambios administrativos derivados de la aplicación de la reforma de la PAC.

Pero también como un año en el que se han alcanzado logros importantes, como el acuerdo para mejorar el sistema de protección por desempleo de los trabajadores agrarios por cuenta ajena del Régimen Especial Agrario de la Seguridad Social (REASS) o la nueva Ley de Arrendamientos Rústicos.

Así lo manifestó el secretario general de UPA-UCE, Ignacio Huertas, durante el balance del año 2005, en el que, señaló, se ha generado un "totum revolutum" que ha hecho pasar al campo extremeño por una situación "complicada".

La sequía ha sido uno de los principales problemas a los que ha hecho frente el sector con pérdidas de más de 400 millones de euros, según indicó Huertas, que valoró las ayudas establecidas por las administraciones que, aunque "nunca son suficientes", han permitido que "parte del sector haya podido salir adelante".

Además de la sequía, añadió, el sector ganadero ha tenido que encarar la enfermedad de la lengua azul que, a su juicio, constituye en la actualidad el principal problema del sector y, sobre todo, en el vacuno.

ACUERDO DEL GASOLEO Por otra parte, valoró el acuerdo suscrito con el Ministerio de Agricultura para paliar el aumento del precio del gasóleo, un acuerdo que, según recordó, establece la implantación del gasóleo profesional a partir del 2009, la devolución del Impuesto Especial de Hidrocarburos del 2007 y el 2008 y el incremento de un punto del IVA compensatorio de agricultura y del 0,5% en ganadería.

Las dificultades administrativas que ha provocado la aplicación de la reforma de la PAC fue otros de los puntos abordados por Huertas que, no obstante, valoró que se haya fijado una consignación presupuestaria hasta 2013 porque "va a dar una cierta estabilidad".

Respecto a la producción, detalló que, en secano, la de cereal ha descendido un 60% y la de aceituna de mesa un 45%, mientras que el viñedo también ha experimentado una reducción, en este caso, del 35%. En regadío, añadió, las producciones han sido "normales o buenas", pero con precios a la baja.