El secretario general de UPA-UCE Extremadura, Ignacio Huertas, ha considerado hoy que la propuesta de la Comisión Europea para reformar la OCM del vino es "muy lesiva" para regiones como la extremeña, donde "se ha emprendido un camino hacia la calidad, pero en el que queda mucho por andar". Huertas hizo estas declaraciones hoy en Almendralejo, donde intervino en unas jornadas de su organización sobre "La reforma de la OCM del vino y sus implicaciones en Extremadura", en las que también participaron representantes del Ministerio de Agricultura y de la Consejería de Agricultura. El dirigente de UPA-UCE, que calificó de "negativa" la OCM que propone la Comisión Europea, declaró que el arranque de 200.000 hectáreas de viñedo, aún siendo menor que la propuesta inicial, sigue siendo una "cifra importante". Vaticinó que el arranque se producirá fundamentalmente en determinadas regiones, como Extremadura, y por parte de "agricultores de las zonas más pobres". Y alertó, en este sentido, sobre el planteamiento de discriminar en la cuantía de las primas de arranque, al dar menores ayudas para las producciones más pequeñas. "Eso va a hacer que arranquen los más pobres, es decir, las comarcas que tengan menor producción, y que al mismo tiempo ese arranque sea más barato", dijo. En su opinión, es "absolutamente necesario" que esta propuesta se cambie, por lo que anunció que, una vez culmine la campaña del sector, harán propuestas en firme para intentar dar un giro al texto planteado, que además recoge que las medidas pueden suponer una pérdida del 27 por ciento del empleo. En este sentido, Huertas declaró que en Extremadura y Castilla La Mancha ese nivel de pérdida de empleo puede ser aún superior, puesto que serán de las comunidades más afectadas. Entre las propuestas que planteará UPA-UCE, Huertas citó el hecho de que los criterios de reparto de los "sobres nacionales" sean tomados por cada Estado miembro y que en ellos se permita que cada país pueda incluir ayudas a las destilaciones y las transformaciones a mostos. Además, pedirán que se introduzca el presupuesto de desarrollo rural dentro de los fondos y que cada estado pueda decidir con carácter voluntario a qué destina esas ayudas, para que sean más beneficiosas para los agricultores. Por su parte, el representante del Ministerio de Agricultura, perteneciente a la Delegación del Gobierno en Extremadura, Juan Martínez Costa, declaró que se trata sólo de una propuesta inicial, "aún queda mucho camino por recorrer", y confía en que el texto que se apruebe recoja modificaciones que beneficien al viñedo español. También estuvo presente Antonio Cabezas, en representación de la Junta de Extremadura, que señaló como "uno de los puntos clave" el de la liberalización de plantaciones, junto con la supresión de las ayudas de regulación del mercado, por lo que la valoración de la propuesta no es positiva por parte del Gobierno regional.