El Servicio Extremeño de Salud (SES) se propone vacunar contra la gripe al menos al 80% de la población mayor de 65 años, frente al 75,1% de los ancianos vacunados el año pasado.

Este es uno de los objetivos de la nueva campaña antigripal, Vacúnate, no juegues con tu salud , que comenzará el próximo lunes, 1 de octubre, y se prolongará hasta el 30 de noviembre.

Durante la presentación de la campaña, el director gerente del SES, Dámaso Villa, explicó que este año se repartirán entre los centros sanitarios de Extremadura 260.000 dosis de vacuna, cuando en el 2006 se distribuyeron 217.241. Sin embargo, según aseguró Villa, "no se espera una cepa más agresiva que en años anteriores". También asistieron a la rueda de prensa el director general de Atención Sociosanitaria y Salud del SES, Emilio Herrera, y el subdirector de Salud Pública, Clarencio Cebrián.

Las autoridades sanitarias insistieron en la eficacia de la vacunación contra la gripe, especialmente para los grupos de población en riesgo, como son los mayores de 65 años, pacientes cuya enfermedad se pueda agravar al contraer el virus, y todo el personal sanitario.

En este sentido, Villa señaló las cifras derivadas de la campaña del año pasado, que muestran que el 87% de los extremeños afectados por el virus no se habían vacunado.

El director del SES destacó además el éxito de las campañas antigripales, ya que antes de que se llevaran a cabo los casos de gripe declarados rondaban los 80.000, frente a los 24.484 afectados del año pasado.

La campaña también va dirigida a personas que prestan servicios comunitarios esenciales, como policías, bomberos, personal de protección civil y docentes, entre otros sectores.

Además, son "población diana" los viajeros internacionales y las personas que puedan estar en contacto con aves afectadas por la gripe aviar.

El presupuesto destinado a esta iniciativa será de 1.301.000 euros, mediante la que se tratará de disminuir el número de complicaciones respiratorias de los afectados por la gripe, reducir la mortalidad causada por las complicaciones y aminorar el número de ingresos hospitalarios.

Villa declaró que es "prácticamente imposible fallecer por la gripe", pero insistió en que las complicaciones que se derivan de la enfermedad, sobre todo en la población de riesgo, "pueden acabar con la vida del paciente".

Por su parte, Herrera negó que al vacunarse se pueda contraer la gripe, "sólo se sienten leves síntomas de reacción local", y precisó que hay que acabar con este "tópico irreal".