El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, afirma en Bruselas que los malos tratos contra las mujeres es "un problema de conciencia humana que se combate modificando la mente de la sociedad". Fernández Vara ha presidido en este ciudad belga la Representación Permanente de España ante la Unión Europea en la V Mesa de Hombres Contra la Violencia de Género, un acto en el que se le impuso el Lazo Blanco "Cecilia 2007", una distinción con la que se reconoce su labor en la lucha constante contra la violencia de género, informa la agencia Efe. El presidente extremeño asegura que el problema de la violencia de género "entra dentro del ámbito de lo consciente del ser humano, no de lo inconsciente o lo instintivo, lo que quiere decir que para erradicar esta lacra debemos luchar contra ella dedicando el tiempo necesario y sin bajar la guardia". Esto hay que hacerlo "a través de muchas pequeñas medidas que consigan transformar la mentalidad de la sociedad en su conjunto". A su juicio, el hecho de que lo que diferencia a los hombres de los animales sea el raciocinio "sitúa el maltrato en el ámbito de lo consciente, y es por ello por lo que hay que erradicar de la mente de los hombres esta conciencia y es ahí donde se debe trabajar". Para esto, en España, asegura el presidente extremeño, hay dos grandes herramientas, la Ley Integral Contra la Violencia de Género y la Ley de Igualdad, que sirven para reconocer y ayudar a erradicar los conceptos de posesión, superioridad o dominación del hombre frente a la mujer. Así, matiza que las leyes reconocen una posición del conjunto de la sociedad frente a un problema pero que es preciso "seguir luchando contra el concepto que existe sobre dominación, la posesión y de superioridad, y hay que demostrar que estos conceptos realmente no existen y la única forma de hacerlo es mediante muchas pequeñas y constantes acciones, dedicándole tiempo y nunca bajar la guardia". "No podemos aceptar bajo ningún concepto que sigan existiendo cifras como las que hoy manejamos en cuanto a la violencia de género. No podemos sentirnos orgullosos de nuestros países y de nuestras sociedades cuando haya mujeres que son asesinadas por el simple hecho de ser mujeres", concluye.