El presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, ha asegurado, desde el "más puro realismo", que el desarrollo del sector energético en la región permitirá generar "no menos" de 10.000 puestos de trabajo estables en los próximos "cuatro o cinco años". Según detalló, estas previsiones de generación de empleo están aparejadas a la puesta en marcha de proyectos como la refinería de petróleo, las plantas de energía eólica, fotovoltaica, termosolar y biomasa, así como los acuerdos a los que se puedan llegar para la ampliación del plazo de la vida útil de la central nuclear de Almaraz.

Para Vara, el sector energético constituye una apuesta "preferente y estratégica" para el crecimiento económico de la región y, además, un nicho "con enorme capacidad" para absorber "gran parte de la mano de obra" que ha sido expulsada de otros sectores en los últimos meses.

El presidente extremeño hizo estas declaraciones en la inauguración del foro regional sobre renovables que se celebró en Mérida, promovido por Enel-Unión Fenosa. En este foro, Vara indicó que la competitividad futura de las empresas extremeñas se sustenta en la posibilidad de conseguir "nuevas fuentes de energía" que permitan producir a un precio más bajo. Según su opinión, el desarrollo de las energías renovables no sólo es cuestión de "ética entre generaciones", sino que también es "garantía de crecimiento y competitividad".

Tras reconocer que "aún queda mucho por hacer" en el ámbito de las renovables, Vara apeló a la "enorme responsabilidad" que tienen las empresas del sector energético para apostar por la "investigación y la innovación".

A su juicio, "el sector energético está obligado a desarrollar I+D+i, innovación que le permita reducir los costes de producción. Esta es la parte que nos falta".