Finales de enero. Esa es la fecha que se ha marcado el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, para alcanzar un principio de acuerdo para cerrar los presupuestos del 2016. "Haremos todo lo que esté en nuestras manos para que Extremadura tenga unos presupuestos que den soluciones a la vida de la gente".

Estas palabras fueron pronunciadas ayer en Madrid, donde participó en el Desayuno Informativo del Fórum Europa organizado por Nueva Economía Fórum.

Fernández Vara cree que contar con unas nuevas cuentas es ahora mismo la prioridad de su Ejecutivo, una vez retirado el proyecto de ley que presentó, ya que fue rechazado con los votos de Podemos y el PP, de lo cual se culpa a sí mismo por no llegar a un acuerdo que le permitiera poner en prácticas rápidamente las políticas que el PSOE anunció durante la campaña electoral.

"Espero que a finales de enero podamos llegar a un principio de acuerdo. No veo otra opción que alcanzarlo, con uno (PP), con otro (Podemos), o con los dos. Pero no contemplo un escenario de prórroga presupuestaria".

También aludió el jefe del Ejecutivo extremeño al nuevo modelo de financiación autonómica que se negociará en los próximos meses, una cuestión que para él debe abordarse "desde la generosidad". "Como entremos en una dinámica antagonista es imposible llegar a un acuerdo", afirmó al respecto.

Asimismo, insistió en que este proceso "va a ser brutal" y "a cara de perro", porque estarán encima de la mesa "los intereses" de cada comunidad autónoma "por encima de los ideológicos".

Tras criticar el sistema de financiación actual, que "fue pensado para Cataluña", se mostró partidario de "desandar el camino" para que "nadie tenga duda de si te dan más o menos, te dan lo que necesitas". Por este motivo, ve necesario que se valore el coste medio y efectivo de los servicios públicos.

También reivindicó una reforma de la fiscalidad autonómica: "Es absolutamente incompatible con el normal funcionamiento de un país el desmadre fiscal que tenemos en España".

SOCIALISTAS Por otra parte, Fernández Vara rechazó de manera contundente que el PSOE permita un Gobierno del PP porque en ese caso su partido "desaparecería del mapa". "Si eso ocurre así, el PSOE dejará de ser un partido fuerte", aseveró, al tiempo que añadió que no se puede pedir al PSOE que haga lo que su votante no entendería. En cuanto al congreso del partido, opina que no se debe celebrar ante de que se resuelva la constitución del nuevo Gobierno.

Según explicó el presidente extremeño, en la anterior legislatura el Ejecutivo del PP ha tomado decisiones que "han hecho mucho daño" y, por este motivo criticó que "para intentar cambiar esas políticas" se pida al PSOE permitir un gobierno en minoría del PP.

"Lo que se nos está pidiendo es que desaparezcamos del mapa", apostilló, remachando: "No se puede pedir al PSOE que haga lo que su votante no podrá entender".

En cualquier caso, se mostró prudente sobre el futuro del Ejecutivo español. "España no es Portugal pero tampoco es Alemania", añadió, descartando, eso sí, la celebración de unas nuevas elecciones, algo que, a su juicio, hay que intentar "evitar a toda costa".