La autopsia practicada al cadáver de Felipe Morquecho, el hombre de 36 años hallado el pasado viernes muerto en su casa de Almendralejo tras nueve meses, desvela que el fallecimiento se debió a causas naturales. Según fuentes policiales, el mal estado del cadáver y el alto grado de descomposición dificultaron la realización de la autopsia, hasta el punto de que el resultado fue nulo. No obstante, según esas mismas fuentes, la ausencia de signos de violencia en el cuerpo del difunto apunta a que la muerte se debió solamente a causas naturales.

La autopsia se practicó el pasado sábado en el cementerio de Almendralejo, lugar donde ya descansan los restos mortales del fallecido. El pasado lunes, a las 20.30 horas, la parroquia de San José acogió el funeral por el alma de Felipe Morquecho al que asistieron sus cinco hermanas, los familiares y los amigos de este almendralejense.

DESINFECCION Por otro lado, el marido de la propietaria del piso de la calle Eugenio Hermoso donde se encontró el cadáver explicó ayer a EL PERIODICO EXTREMADURA que durante toda esta semana se están llevando a cabo trabajos de desinfección en el interior de la vivienda. En concreto, una empresa especializada en la eliminación de plagas está trabajando en el piso para evitar así posibles infecciones, sobre todo en el dormitorio donde apareció el cuerpo el pasado viernes. Además, la familia propietaria del inmueble aseguró que ya se ha deshecho de todos los enseres de la vivienda y que reformará en breve el piso.

Con todo, lo que sí confirmó la autopsia es que, al menos, el fallecimiento de Felipe se produjo hace nueve meses. Algo que ya el pasado viernes apuntaron alguno de los vecinos del bloque de piso donde vivía el fallecido desde hacía cinco años, ya que desde octubre nadie le había visto en la zona. El fallecido trabajaba en la construcción, estaba divorciado y era diabético.