Falta de mentalidad, información y precios elevados. Son las tres dificultades con las que el coche sostenible se está encontrando en Extremadura. En lo que va de año los extremeños han adquirido 44 vehículos híbridos y ocho eléctricos bajo las líneas de ayuda de la Junta y el Gobierno central.

El plan de la Administración regional se puso en marcha el pasado año, dentro del Plan de Acción 2008-2012 de la Estrategia española de Cambio Climático y Energía Limpia, y aún queda un tercio de los fondos destinados únicamente para la compra de vehículos híbridos --aquellos que combinan dos motores, uno eléctrico mediante baterías y otro de explosión de combustible convencional--, pero la convocatoria finalizó hace dos meses.

Pendiente también de un plan similar para la introducción de los vehículos eléctricos en la región que se espera en breve, la Junta, en colaboración con el Instituto para la Diversificación y Ahorro Energético (IDAE), ha concedido ayudas por un importe de 123.873 euros para la adquisición de estos vehículos sostenibles. El presupuesto alcanzaba los 200.000 euros, por lo que el dinero sobrante se empleará para la próxima convocatoria de subvenciones que se prevé abrir en enero.

La apuesta regional por lo vehículos híbridos en primer lugar se justifica porque, según Industria, estos "óptimos" para la circulación por zonas urbanas, "puesto que en velocidades bajas funcionan únicamente mediante el motor eléctrico, siendo el ruido mínimo y la emisión de gases nula", el mismo argumento con el que intentará impulsar el coche eléctrico el próximo año.

La ayuda del gobierno permite rebajar hasta 3.000 euros la factura de la compra de un vehículo de este tipo, pero en ningún caso podrá exceder del 15% del precio de mercado del turismo. Este dinero no es un descuento directo, sino que lo recibe el comprador tras remitir la factura de compra a la Consejería de Industria.

A esta iniciativa en Extremadura para los híbridos se suma el Plan Movele, un proyecto piloto estatal que el Ministerio de Industria impulsó el pasado año para incentivar la adquisición de vehículos únicamente eléctricos y conocer su respuesta en el país. Hasta el momento, el plan ha conseguido poner en circulación ocho vehículos eléctricos en la región--seis cuadriciclos comerciales, un cuadriciclo turismo y una motocicleta, todos en la provincia de Badajoz--.

En el país han sido 1.322 las solicitudes para optar a este descuento, pero solo se han aprobado 896 hasta el momento. El objetivo era alcanzar los 2.000 vehículos este año, según datos del IDAE. Con los objetivos sin cumplir, el Gobierno se plantea ahora prorrogar el proyecto Movele, que caduca el próximo 31 de diciembre, al emplear apenas 3,75 de los ocho millones presupuestados.