El vertido accidental el pasado 30 de julio de treinta toneladas de fuel en las costas de Huelva procedentes de un buque que descargaba en la refinería La Rábida, propiedad de Cepsa, ha dado pie a varios colectivos para reafirmarse en sus posturas contrarias a la construcción de una industria de este tipo en Tierra de Barros. La razón que aducen es que la nueva refinería, y el oleoducto que la uniría con el litoral onubense, multiplicarían el riesgo de mareas negras en la zona, donde está el Parque Nacional de Doñana.
En esta línea, la Asociación Mesa de la Ría de Huelva consideró ayer que con este vertido se ha demostrado "el inasumible riesgo" que supone para las costas onubenses la construcción del nuevo oleoducto del grupo Gallardo y la ampliación de La Rábida, debido a que "aumentarían considerablemente el número de petroleros en nuestras costas".
Para Fernando Hiraldo, director de la Estación Biológica de Doñana --institución del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y cuyos órganos de gobierno han rechazado el oleoducto que abastecería a la refinería de Gallardo--, el impacto en Doñana del vertido del 30 de julio "tiende a ser nulo", pero cree que debería ser "una vacuna" frente a futuras amenazas. En su opinión, aunque este vertido ha sido de escasa envergadura, ha evidenciado la necesidad de que implementar en las industrias petroquímicas onubenses "planes de alerta más afinados" y dice que "todo aumento del bombeo de petróleo en Huelva eleva el riesgo de vertido sobre Doñana y las playas de la provincia".
También desde la organización ecologista WWF/Adena se solicitó ayer mediante una carta remitida al Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino que se desestime el proyecto de la Refinería Balboa, considerando negativa su Declaración de Impacto Ambiental (DIA). Igualmente, se ha instado a la consejería del ramo de la Junta de Andalucía a que se posicione en contra del proyecto por "el alto riesgo" que supone tanto para el Parque Nacional de Doñana como para las costas onubenses y gaditanas.
El responsable de la oficina de Doñana de WWF España, Juanjo Carmona, criticó el apoyo del Gobierno extremeño al proyecto de Gallardo. Desde WWF/Adena aseguran que con la construcción de Refinería Balboa el riesgo de mareas negras sobre Doñana se multiplicará por cuatro. Actualmente, dicen, la zona cuenta con un tráfico anual de 50 petroleros, a los que habrá que sumar otros 50 por la ampliación, ya aprobada, de la refinería de La Rábida, y otro centenar más con Balboa.
