Villanueva de la Vera se encuentra inmersa desde el sábado, con la confección del muñeco, en plena celebración de la popular fiesta carnavalesca del Peropalo, cuyos ritos alcanzarán su máximo esplendor mañana.

Ayer domingo comenzó La Judiá, hasta el martes, que será el día más representativo de las fiestas villanovenses con varias actividades: el toque de diana, la recogida de alabardas, la corrida de las elecciones --en la que un mozo recorre en burro las calles del pueblo anunciando la condena a muerte del Peropalo--, la salida de los calabaceros, el ofertorio de estos últimos, la paseo de la capitana, la jura de bandera, las angarillas y la muerte del Peropalo, con posterior quema del pelele.

Sin duda la corrida de las elecciones, tomará este año el punto más polémico de la festividad, después de que diversos grupos de defensa de los animales denunciaran el uso del burro en este pasaje porque consideran que el asno sufre malos tratos en esta fiesta, declarada de Interés Turístico Regional, pese a la negativa de autoridades locales y vecinos. Una de estos grupos, El Refugio del Burrito, denunció en Mérida hace unas semanas el uso de este animal.

El origen de esta fiesta es desconocido, aunque hay varias hipótesis que remontan la tradición a diversos hechos acaecidos durante la Reconquista.