Villanueva de la Vera celebró ayer el día grande del Pero-Palo, sin apenas presencia de ecologistas que vigilaran el trato dado al burro que participa en la denominada Corrida de las elecciones , por medio de la cual un joven montado en un asno da a conocer al pueblo que el Pero-Palo ha sido condenado a muerte. "Efectivamente este año el Carnaval ha destacado por una gran afluencia de público y el escaso número de ecologistas que ha habido", señaló el alcalde, José Antonio Rodríguez.

El edil achaca este cambio de actitud de los conservacionistas "a que hemos demostrado por activa y por pasiva, uno año detrás de otro, que aquí no se maltrata a ningún animal".

COMUNICACION Una hora y veinte minutos empleó el joven encargado de difundir la sentencia en cumplir su cometido, volviendo el burro a las 11.15 de la mañana sano y salvo al lugar donde estaba aparcado el vehículo todo terreno que le trasladó a su lugar de origen, acompañado de un portavoz de la asociación El Refugio del Burrito, quien señaló en declaraciones a este diario "que aparentemente ha terminado bien, sin heridas, pero sí tiene cansancio y estrés".

No obstante indicó que "nos parece mal que se utilice un burro. Y si se usa, que se tengan en cuenta las características del animal, y la duración del paseo que no sea superior a una hora", evitando el toque de cencerros y el disparo de salvas con escopetas. En términos parecidos se expresó el representante del Comitato Europeo para la Difesa Animali (CEDA), Elvino Gasparotti.

La mañana estuvo plagada de actos coloristas, junto con la entrega de las alabardas.