Dolor, rabia, pero también esperanza. Las principales ciudades extremeñas se unieron ayer a los actos con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, una lacra social que ha supuesto en lo que va de año la muerte de 64 mujeres en España.

Con pancartas en las que se denunciaba: "En nueve años han sido asesinadas 557 mujeres. No consentimos ni una más" y "¿Es necesario recibir un golpe para sentir la violencia?", algo más de un centenar de personas se dieron cita en la plaza de España de Mérida para sensibilizar sobre los malos tratos a las mujeres.

Asociaciones de mujeres y buena parte del equipo de gobierno local, encabezado por el alcalde, Angel Calle, se concentraron en un acto que se inició con cánticos de alumnos de la asignatura Coro del conservatorio municipal de Mérida, que interpretaron una canción popular africana y otra venezolana. Tras un minuto de silencio, se leyó un manifiesto en el que se transmitía el "dolor, la indignación y la condena" de las organizaciones convocantes.

En Plasencia, la Asociación por la Igualdad de Género 8 de Marzo organizó ayer por la tarde una manifestación contra los malos tratos que comenzó en el parque de la rana, recorrió algunas de las calles más céntricas de la ciudad y finalizó en la plaza Mayor. Fue allí donde una de las integrantes del Consejo Municipal de la Mujer leyó un manifiesto en repulsa a la violencia de género, "contra los asesinatos de mujeres que se suceden cada día por el mero hecho de serlo", destacó entre aplausos.

Alrededor de 300 personas participaron en Badajoz en una manifestación convocada por Mujeres Progresistas de Badajoz en contra de la violencia de género por noveno año consecutivo, como recordó su portavoz, Esther Barragán, si bien se celebraba en días de diario, aunque con igual itinerario, de los juzgados hasta el parque de San Francisco, donde ayer se despidió la manifestación con un concierto a cargo de Kanina Connection, Manuel Salitre y PVC, informa Fernando León.

El Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres sirvió para que miles de ciudadanos salieran a la calle en las principales capitales españolas para mostrar su firme condena a la violencia machista. En Madrid, el acto obtuvo la respuesta de varios actores y pasacalles que amenizaron la protesta. En Sevilla se concentraron unas 2.500 personas, en Córdoba la cifra llegó a los 5.000 asistentes y en Zaragoza fueron unos 700.