El secretario general de Desarrollo Rural y Territorio, Manuel Mejías, presidió ayer la Mesa del Regadío de Extremadura que tuvo lugar en el marco de Agroexpo, feria que se desarrolla estos días en Don Benito. Según ha detalló Manuel Mejías, Extremadura necesita una segunda modernización y ampliación de sus regadíos «y en este plan y en esa perspectiva estamos trabajando».
La Consejería de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio entiende que el cambio climático es «ya una realidad», ya que cada vez llueve menos y los veranos son más largos, por lo que Extremadura debe modernizar y ampliar nuevos regadíos, más sostenibles, más eficientes desde el punto de vista energético, con menor consumo de agua y llevar riego de apoyo al olivar, las viñas o los frutales.
Mejías ha explicado que en Arroyo del Campo se va a ampliar el plazo para la recogida de voluntades de riego y se van a introducir modificaciones, como incluir en la superficie regable la zona de los Quintos, en Villanueva de la Serena.
Por otro lado, la consejería creará bolsas de tierra en seis zonas regables de la región para facilitar el encuentro para quienes deseen ofrecer sus tierras en arrendamiento o venta entre aquellos agricultores que deseen mejorar la productividad de su explotación. Este proyecto se encuadra dentro del proyecto de modernización de regadío previsto en la Ley Agraria de Extremadura.
La Bolsa de Tierras de Regadío de Extremadura se implementará, inicialmente, en seis zonas regables de la región: Casas de Don Antonio, Valdecañas y Margen derecha del río Salor en la provincia de Cáceres y Olivenza, Jerez de los Caballeros y Zalamea en la provincia de Badajoz.
Asimismo, el secretario general ha adelantado ante los medios que el próximo 21 de febrero se celebrará en el Palacio de Congresos de Mérida un Foro del Regadío en el que van a participar especialistas y profesionales de todo el país. «Queremos hablar y debatir sobre los regadíos del futuro, de la próxima década; nos parece un debate esencial porque la gestión del agua será un asunto de la máxima prioridad y necesitamos tener definido el modelo de regadío que necesitamos, sus características o sus costes», ha recordado Mejías.
