El príncipe Alberto de Mónaco y su pareja, la nadadora Charlene Wittstock, viajaron ayer a la estación suiza de Saint Moritz para participar en la tercera edición de la carrera de bobsleigh (foto). Charlene, que cumplió ayer 30 años, alegó una tendinitis en el hombro cuando renunció a su participación en los Juegos Olímpicos de Pekín. Pero la lesión no le ha impedido practicar deportes de invierno.