Anita Roddick, fundadora de la conocida cadena de tiendas de cosméticos Body Shop, ha muerto a la edad de 64 años, anunció su familia en un comunicado divulgado en el Reino Unido. Según la nota, Roddick murió ayer a las 17.30 GMT en el Saint Richard's Hospital de Chichester (sur de Inglaterra) como consecuencia de una "fuerte hemorragia cerebral" . Su marido, Gordon, y sus hijas, Sam y Justine, se encontraban con la empresaria en el momento de su fallecimiento.

Roddick ingresó en el centro médico este domingo a causa de un desmayo tras quejarse de un repentino dolor de cabeza, según precisó el comunicado. La fundadora de Body Shop reveló el pasado febrero que padecía hepatitis C, de lo que se enteró, al parecer, tras hacerse unos análisis de sangre rutinarios. "No tenía ni idea de que portaba el virus", dijo entonces Roddick, al puntualizar que también sufría de cirrosis como consecuencia de la hepatitis.

Al parecer, la ex dueña de Body Shop contrajo el virus de la enfermedad, una de las principales causas de muerte por cirrosis y cáncer hepático, por una transfusión sanguínea recibida al dar a luz en 1971 a su hija menor, Sam. "Tener hepatitis C significa que vivo con un sentido más agudo de mi propia mortalidad, lo que, de muchas maneras, hace que la vida sea más intensa e inmediata", comentó en febrero la empresaria. Roddick agregó que esa enfermedad debe "tomarse en serio" y hay que prestarle "atención", pues mucha gente desconoce que la sufre.

Hija de inmigrantes italianos, la empresaria se hizo famosa por el éxito de Body Shop, una aventura comercial que empezó en 1976 con la apertura de una modesta tienda en Brighton (sur de Inglaterra) que vendía cosméticos hechos de ingredientes naturales. La compañía, que ahora cuenta con 2.000 establecimientos en todo el mundo, fue comprada el año pasado por el grupo cosmético francés L'Oreal por 652 millones de libras (unos 978 millones de euros), aunque sigue conservando su identidad británica.

Antigua maestra y empleada de la ONU en Ginebra (Suiza), Roddick se ganó una gran respeto y admiración en su país por saber combinar la ética con los negocios. Conocida también por su labor en defensa de los derechos humanos y de la ecología, Anita Roddick fue distinguida en el 2003 con el título de Dama del Imperio Británico, que entrega la reina Isabel II de Inglaterra.

Tras informarse del fallecimiento se produjeron numerosas reacciones de grupos y organizaciones relacionados con la defensa de los derechos humanos, el cuidado del medioambiente, la beneficencia y otras causas nobles, así como del primer ministro británico, Gordon Brown. "Me sentí muy triste al conocer la muerte de Anita Roddick", afirmó Brown, al subrayar que la ex dueña de Body Shop fue "una de las empresarias más exitosas de este país" y "una inspiración para las mujeres".

John Sauven, director ejecutivo de la organización ecologista Greenpeace, lamentó la pérdida de la fallecida, a quien describió como una "mujer increíble" y una "impresionante inspiración para quienes la rodeaban". El director de la organización contraria a la pena de muerte Reprieve, Stafford Smith, declaró que el fallecimiento constituye una "verdadera pena", ya que Roddick "había aceptado ser la presidenta (de esa organización)". "Es un duro golpe para su familia y para quienes la conocían", agregó Smith, al subrayar que "se la echará mucho de menos". Emma Colyer, directora del grupo contra el sida "Body & Soul", del que la difunta era patrona, destacó que la empresaria era una persona "llena de energía e ideas", a la vez que agradeció su "dedicado apoyo".