Un tribunal escocés ha declarado culpable a Mark Meechan, de 30 años, por un delito de odio tras difundir un vídeo en abril de 2016 llamado "Colega, tu perro es un nazi", donde se le ve enseñándole a un can de raza carlino, llamado Buddha, a levantar la pata derecha al grito de sieg heil, entre otras cosas "desagradables".

En esas imágenes que se volvieron virales en Internet, Meechan comienza diciendo que su novia siempre habla “de lo bonito que es su perro”, por lo que quería convertirlo "en lo menos adorable" que se le ocurriera, es decir, un nazi. El resto es un compendio de barbaridades mezcladas con un humor muy negro en el que se aprecia al animal haciendo el saludo hitleriano o reaccionando a frases tipo: "¡Vamos a gasear judíos!".

Las denuncias y quejas de algunos usuarios sobre el contenido del vídeo fue lo que llevó a las autoridades a detener a Meechan. Dos años después, y tras un proceso judicial que ha durado varios meses, la historia se ha vuelto muy mediática en el Reino Unido. "Si no crees en el derecho de una persona a decir cosas que podrías considerar extremadamente ofensivas, entonces no crees en la libertad de expresión", ha asegurado el comediante Ricky Gervais, en alusión al caso.

Durante el juicio, Meechan ha argumentado en su defensa que adoctrinó al perro únicamente para molestar a su novia, Suzanne Kelly, y que esperaba que el vídeo solo lo vieran sus amigos. Sin embargo, el juez que presidió el tribunal, Derek O’Carroll, considera que el video es “extremadamente ofensivo”, además de “antisemita y racista por naturaleza”. El joven permanecerá en libertad bajo fianza hasta que se dicte su sentencia el próximo 23 de abril.