En el culebrón sobre la muerte de Diana surgió ayer un nuevo elemento. Poco antes de estrellarse, el Mercedes en el que la princesa perdió la vida habría chocado con otro automóvil, grande y de color oscuro. Así lo afirman dos testigos, Jean-Claude Catherine y su esposa Annick.. La pareja, que testificó ayer, explicó que tras ver pasar los automóviles oyeron el ruido de una colisión y el chirrido de los neumáticos "como de dos coches que chocan".