Ni para la SuperBowl, el fenómeno deportivo por excelencia en Estados Unidos, se habían acreditado nunca tantos periodistas. Fueron 700 los que ayer cubrieron la presentación en Los Angeles de David Beckham como el nuevo jugador estrella del Galaxy, el equipo de fútbol local.
Tampoco a muchos deportistas les esperan las decenas de paparazis y cámaras que el jueves eran contenidos tras barreras de seguridad en el aeropuerto de Los Angeles mientras registraban caóticamente la llegada del exmadridista y su esposa, la spice pija Victoria Beckham. Es oficial: la beckhamanía se ha desatado en Estados Unidos. Y la pareja no ha dejado prácticamente nada al azar.
Sí, el factor deportivo cuenta, como demuestran la aparición del futbolista en la portada de Sports Illustrated, los artículos en espacios de deportes y la rueda de prensa de ayer retransmitida en directo por el segundo canal de ESPN. Pero tanto, o incluso más, cuenta el milimétricamente preparado desembarco de los Beckham en el epicentro de la industria del entretenimiento.
La actual pareja platino ocupa la portada de la revista W y el intenso reportaje fotográfico interior, firmado por el a menudo polémico Steven Klein, deja traslucir poco el deporte o la entrañable vida familiar que los Beckham aseguran mantener con sus tres hijos --Brooklyn, Romeo y Cruz--.
En ninguna de las 15 fotos, tomadas cerca de Madrid, el futbolista cubre su espectacular torso. Ella luce siempre provocativa lencería o ropa de baño. La sesión fotográfica coincidió con el rodaje de Victoria Beckham : going to America , un reality show sobre la mudanza desde Madrid hasta California que la NBC va a emitir el lunes. El programa probablemente permita dar una mirada en detalle a la villa de estilo mediterráneo que, por 16 millones de euros, la familia ha comprado como nueva residencia en el corazón de Beverly Hills. La mansión cuenta con seis habitaciones, una piscina, una pista de tenis y también una sala de proyecciones pero, según Victoria Beckham, no es nada "demasiado grande, a la moda u ostentoso". El objetivo, según le ha explicado Victoria al periodista de la revista W que firma el reportaje fotográfico, era encontrar "algo práctico para los niños".
Los Beckham han demostrado estar listos para su nueva vida en Estados Unidos. Y ya cuentan con amigos importantes en Los Angeles como Tom Cruise y Katie Holmes y Marc Anthony y Jennifer López.
La cantante de origen hispano incluso ha ayudado a Victoria Beckham comprobando cómo les sientan a las mujeres con curvas algunos de los vaqueros que la exspice va a lanzar --junto a una colección de gafas de sol y dos fragancias--.
También es probable que le haya dado ya consejo sobre cómo mantener una relación fluida con la prensa del corazón porque Victoria Beckham ya ha anunciado que va a "intentar sonreír más para América".
